Nayeli Nesme y su profundo amor por María Grever
María Grever fue una mujer transgresora, adelantada a su tiempo y con una capacidad creativa que desbordaba lo humanamente posible. María Joaquina de la Portilla Torres nació el 14 de septiembre de 1885 en León, Guanajuato, desde temprana edad manifestó interés en el campo musical, dominado exclusiva e injustamente por los hombres. Su importancia es tal que fue una de las primeras mujeres compositoras en obtener el reconocimiento internacional. Por si fuera poco, fue discípula de los compositores Claude Debussy y Franz Lehár, a lo largo de su prolífica carrera compuso más de 800 temas, varios de los cuales forman parte del cancionero popular mexicano e incluso latinoamericano, entre sus composiciones más conocidas se encuentran: “Cuando vuelva a tu lado”, “Júrame”, “Muñequita linda”, “Alma mía”, “Despedida”, “Ya no me quieres”, “Por si no te vuelvo a ver”, “Vida mía” y muchos otros.
Desafortunadamente, Cronos es celoso del aventurado destino de algunos seres humanos y con su implacable furia los hace caer en el olvido, el tiempo lo devora todo. Consciente de la valía e importancia de la Grever, la cantautora, compositora y estudiosa musical, Nayeli Nesme comenzó la titánica tarea de sacar del ostracismo la gran trayectoria de la guanajuatense. Para tal motivo ha dedicado gran parte de su labor académica a estudiar la vida y obra de la creadora de “Júrame”, el resultado de sus investigaciones desembocó en el libro María Grever. Reflexiones sobre su obra (Universidad de Guadalajara, 2009).
Nesme consolidó la creación del Ensamble Grever, conformado por el guitarrista y director musical Jorge García Montemayor, el contrabajista Agustín Bernal, la segunda voz e hija de Nesme Elena Garnes, el pianista y compositor Francisco Velasco y los artistas invitados: Ángel Pérez Aguilar (bandoneón), Leonardo D´Aquila y Mauricio Sotelo.
El producto del estudio y la intensa investigación sonora dio como resultado el recital “María Grever: Di qué has dejado en mi ser”, show que engalanó el Salón del Consejo Universitario de la Universidad de Guanajuato. 16 re-interpretaciones del extenso repertorio de la “Euterpe de Guanajuato”, compuestos originalmente para voz y piano se transmutaron radicalmente al ser ejecutados con un piano, contrabajo, guitarra y la desmesurada voz de soprano de Nesme acompañada por la aterciopelada voz de Garnes.
Con una puesta en escena que se asemejaba a la de los clubs clandestinos de jazz y blues, el Ensamble Grever transitó por sonidos jazzie pastosos, toques de bebop, balada y bolero.
Bajo la luz tenue, Nayeli cimbró las bóvedas del Salón del Consejo, su potencia fue tal que opacó la instrumentación que debía cobijar su voz. Entre tema y tema, Nesme desmenuzó diferentes facetas de la vida creativa y afectiva de Grever.
Hubo destellos de magnificencia cuando el ensamble ejecutó variaciones sonoras de free jazz y Garnes endulzaba los tímpanos con la rica paleta de registros que maneja su voz. El público dejó pasar por alto pequeños deslices por parte de Nemes y se le rindió de manera absoluta cuando interpretó “Júrame” y una pareja de bailarines de tango nos regaló una sesión de arrabaleria que nos transportó a los bajos fondos del Río de La Plata.
El mérito más encomiable del Ensamble Grever es que está rescatando a una de las mujeres músicas más representativas de la primera mitad del siglo XX, gracias a la labor de Nesme y compañía las nuevas generaciones conocerán el gran legado que nos heredó la musa oriunda de la perla del bajío.