En los primeros seis meses de la pandemia por COVID-19 el número de trabajadoras sexuales se incrementó 100% en la Ciudad de México, de acuerdo con cifras de Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer “Elisa Martínez”. Sin embargo, la cantidad de trabajo disminuyó 90%. Además, las trabajadoras se enfrentan a cobro de derecho de piso, violencia y poco acceso a servicios de salud.

En entrevista para Tengo Otros Datos, Elvira Madrid, directora de Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer “Elisa Martínez”, denunció que el gobierno capitalino no se ha preocupado por la economía, la salud, ni la estabilidad emocional de las trabajadoras sexuales.

La organización lanzó la campaña Resistir para no morir, que busca dar apoyo legal, psicológico y económico.

“No solamente perjudicó la salud , sino emocionalmente. Ya van cuatro compañeras que pierden la memoria. También ha aumentado la violencia, hemos estado abriendo carpetas de investigación porque es la única forma de evidenciar y que se haga justicia”

Sobre las carpetas de investigación, Elvira Madrid denunció que han aumentado 30% debido a las agresiones que sufren las trabajadoras sexuales de parte de la sociedad, crimen organizado y personal policiaco.

La directora de Brigada Callejera declaró que son las mujeres a quienes se expulsa primero de los trabajos estables, por lo que el 40% que había logrado salir del trabajo sexual tuvo que regresar a las calles. Además, 20% de quienes empezaron en el trabajo sexual en el último año son amas de casa, quienes, en muchas ocasiones, han presentado contagios de enfermedades de transmisión sexual.

Escucha aquí la entrevista completa: