En algún lugar nuestra cabeza alberga la imagen de la combi amarilla de Little Miss Sunshine en camino al concurso de belleza.
Un coche con un tanque lleno de gasolina, nos llevará a cualquier lugar que el camino lo permita. Con o sin destino, el viaje comienza.
Esto es, El Cine y… los road trips.
Tras largas horas de manejar y sumergirnos en los paisajes que rodean la carretera, quizá nos encontremos en Paris, Texas, o crucemos caminos con Thelma y Louise, o tal vez nos topamos con una impresión a gran escala de Agnès Varda junto con JR.
En Faces Places, Agnès Varda y JR emprenden la misión de recorrer el campo de Francia para retratar, conocer y recordar. Su viaje encuentra significado en las conversaciones y conexiones que establecen con las personas y espacios a los que llegan.
“Conocer nuevas caras y fotografiarlas para que no caigan en los agujeros de mi memoria” es como la directora francesa se expresa de la vivencia de su penúltima película.
A veces, las condiciones externas causan que nos movamos de lugar. En el cine, los personajes que emprenden un trayecto por carretera suelen ser consumidos por conflictos internos donde el paisaje comparte el mismo vacío y aislamiento que ellos.