Hace muchos años (en los noventa, para ser precisos), existió la banda más importante de stoner rock: Kyuss, quienes con su sonido sucio sentaron las bases definitivas para el estilo de este sub-género del metal; sin embargo, el gran ego de Josh Homme lo llevó a desintegrar la leyenda, formar su propio acto, e incluso, renegar de la etiqueta de stoner rock. Con Queens of the Stone Age, Homme ha gozado del éxito que siempre eludió a Kyuss, y la sobrevaloración de QotSA en los medios compensa la cruel incomprensión que sufrió la mítica banda desértica de California; lo cierto es que el inestable Homme ha logrado convertirse en uno de los músicos más populares de nuestra época, y ha participado en otros proyectos de buena manufactura y saludable éxito comercial, como Eagles of Death Metal o Them Crooked Vultures; lo que es muy triste, es que actualmente repudia la etiqueta de "stoner rock". Pues, según él, dicho término implica que las composiciones fueron hechas bajo la influencia de narcóticos. En realidad, sus traumas y obsesiones a nosotros no tendrían por qué importarnos; la verdadera cuestión aquí es que …Like Clockwork, lanzamiento 2013, parece, en efecto, tener la misión de eliminar cualquier rastro stoner que quedaba en la música de Queens of the Stone Age.
Como habrán notado quienes estén al tanto de la discografía de los QotSA, hay un gran hueco de seis años entre Era Vulgaris (2007) y …Like Clockwork; esto se debió, principalmente a dos razones: su involucramiento con Them Crooked Vultures en 2009, y su cirugía de rodilla en 2010, que provocó complicaciones por asfixia; lo que causó que Homme estuviera clínicamente muerto por algunos instantes, experiencia que, en palabras de Homme, afectó decisivamente la elaboración de …Like Clockwork; esta declaración, en la teoría, suena muy interesante, pero en la práctica, produjo una obra muy dispareja musicalmente.
Por supuesto, no podemos juzgar a Josh después de la experiencia por la que pasó, pero el sentido del humor ácido de sus álbumes pasados ha desaparecido; quizás Homme se ha tomado demasiado en serio su necesidad de madurar como músico y, en el intento, sus composiciones también han perdido poder; por el lado bueno, es un álbum lleno de contrastes anímicos e instrumentales, que reúne la luz y la sombra de la vida y la muerte, del juego del tiempo; claros ejemplos de estos claroscuros son "Keep Your Eyes Peeled" y "Kalopsia"; esta última en colaboración con Trent Reznor —otro que ha pasado por conflictos existenciales/musicales—; todo esto está muy bien, el único problema es que no suena a un lanzamiento de los QotSA, por lo que el fan promedio al rock duro de antaño se llevará un gran susto; sin embargo, los aficionados leales podrán encontrar un refugio agradable en temas como "If I Had a Tail" y "I Appear Missing", que guardan un sabroso vestigio del agresivo trabajo de composición de Songs for the Deaf, y de los riffs y distorsiones de Era Vulgaris. Además del experimento con Reznor, el otro dueto importante en esta placa se encarna en "Fairweather Friends", con el sexagenario Elton John, una canción de rock decente, pero que, una vez más, desentona dramáticamente con el que había sido el estilo de QotSA… probablemente hubiera funcionado mejor como sencillo o lado B. Para culminar la obra, la titular "…Like Clockwork" es un lamento que deja una sensación final de desasosiego y que parece sacado del manual de composiciones lastimeras de Coldplay, ideal para quienes tienen la idea de que el rock es para cortarse las venas.
http://youtu.be/-90obSa1Az4
En lo que Queens of the Stone Age sí ha mantenido el estilo, es en lo feo y disparejo de sus portadas, que en su conjunto no parecen la obra de un mismo grupo, ni de un mismo artista gráfico (por lo menos, podemos agradecer que ya murieron los ridículos bulbos del Era Vulgaris). En el caso del vampiro que aparece sobre fondo rojo, es una alusión al tema "The Vampyre of Time and Memory", una power-ballad que nada tiene que envidiarle al trabajo ochentero de Bon Jovi o Cinderella, y que por cierto, es lo menos rockero de su discografía, a pesar del sensible solo de guitarra final.
Para darle una oportunidad a …Like Clockwork, habría que verlo como un disco solista de Josh Homme, en el que decidió recurrir al nombre de QotSA, como hacen tantos músicos; —de cualquier modo, es su banda a final de cuentas y puede hacer con ella lo que le entre en gana—. Habrá que esperar el próximo proyecto en el que se involucre Homme, aunque a este paso, no sorprendería una asociación con Drake Bell para una segunda versión de Drake & Josh.