Lejaim por la vida: 18 edición del Festival de Cine Judío en México
Foto cortesía: FICJM
Siempre que se habla de la relevancia del cine en la sociedad contemporánea se suele decir que es, junto con otras manifestaciones artísticas y culturales, “una de las cosas más importantes de lo menos importante”.
En medio de los tiempos que vivimos, y tras poco más de un año de una emergencia sanitaria global que ha confinado a buena parte de la población del mundo, hemos tenido tiempo de pensar mucho en esa frase y redimensionar su verdadero significado. De descubrir qué es lo trascendente para cada quien y el valor fundamental de la salud y la existencia.
Hoy lo verdaderamente importante parece cuidarnos y cuidar de los nuestros frente a una dura batalla que se ha cobrado la vida de familiares, amigos y conocidos. También resulta fundamental aprender a hacer las cosas que nos tocan de una nueva manera y reinventarnos día a día en la escuela, la familia, el trabajo y nuestras interacciones sociales.
Y es justo ahí, en el reto que ha significado guardarnos e inventar nuevos modos de convivencia y comunicación a distancia que las películas, la música, los libros, la radio, la televisión, las plataformas de streaming y muchas otras expresiones artísticas y del entretenimiento han cobrado una relevancia fundamental. Tanto que nos han permitido aferrarnos a ellas como tablas de salvación para atravesar gracias a su respaldo nuestros naufragios personales. Esos que fueron un poco más llevaderos gracias a los acordes de una melodía, la voz de una locutora, la frase poderosa del autor de una novela o el desenlace de nuestra serie favorita.
Foto cortesía: FICJM
En ese contexto, y entendiendo muy bien esta nueva noción de lo verdaderamente importante, arranca la décimo octava edición del Festival de Cine Judío en México que se reinventa a través de una oferta híbrida que permitirá ver su programación tanto en salas de cine cómo en plataformas digitales.
Cinco producciones de países tan distintos como Japón, Lituania, Israel, Alemania o Francia que nos permiten una vez más asomarnos gracias a sus historias en otros mundos.
A las complejas relaciones de madres solteras con sus hijas adolescentes en el Israel de nuestros días. A la aventura de un diplomático japonés que se rebela frente al poder en pleno corazón de Europa durante la Segunda Guerra Mundial. Al papel del arte y la música, ya sea clásica o popular, cómo herramienta de diálogo o esperanza de reconciliación entre los que se piensan y sienten diferentes.
Utilizando como lema una expresión tan poderosa como Lejaim, que sirve normalmente para brindar por la vida y celebrarla, el Festival de Cine Judío en México nos recuerda que pese a todo el cine sigue y es una extraordinaria manera de celebrar que estamos aquí.
Sirva este texto como el arranque de la revisión y cobertura que haremos desde El Cine y... de las cintas del FICJM que inicia esta semana y se podrá ver en salas de Cinépolis, Cineteca Nacional, y posteriormente en línea, a través de Cinepolisklic.
¡Buen festival a todos!
Lejaim.
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