El mundo lamenta la pérdida del Filósofo del Gol, Hendrik Johannes Cruijff o mejor conocido como Johan Cruyff. Quien dejó de existir la mañana de este pasado 24 de marzo a la edad de 68 años, consecuencia del cáncer de pulmón que le aquejaba desde octubre de 2015.
Pensador, estratega, crítico y revolucionario que logró transformar al fútbol en algo más que un simple juego. Ganador tres veces del Balón de Oro de la FIFA, Cruyff fue el creador del concepto de “fútbol total” base y antecesor del tiki taka de Pep Guardiola, juego de toques cortos preciosos y elegantes, movimientos ágiles y gran velocidad, cual pinceladas sobre un lienzo de un gran pintor.
Un clamor social, que al mismo se convierte en arte lleno de estética, así lo vieron Andy Warhol, Miguel Calderón, Nelson Leirner, Carolyn Castaño y Stephen Dean, tan solo algunos artistas que han retratado en sus obras al fútbol.
"El juego sencillo es el más precioso ¿Cuántas veces ves un pase de 40 metros cuando 20 son suficientes? La solución que parece más fácil es de hecho la más difícil" Johan Cruyff.
Jugador del Ajax de Holanda con el cual marcó 204 goles, suficientes para conseguir trece títulos locales y cinco títulos internacionales, ya como entrenador le dio al club dos copas de liga y una recopa de Europa. Como “ajedrecista” era capaz de intercambiar su posición con la de sus compañeros y dirigir al equipo dentro del campo, evitando las marcas personales, y permitiendo una mayor profundidad en su ataque, algo nunca visto antes de él.
"Yo creo que la gente debería ser capaz de jugar en todas las posiciones del campo. Por eso es tan importante que todos escuchen durante las conversaciones tácticas. El extremo izquierdo no puede dormirse cuando el entrenador habla sobre el lateral derecho"
Pero su mayor legado lo tuviera fuera de su natal Holanda, a 1,605.2 km para ser exactos, en Cataluña, con el FC Barcelona, creador de La Masía con este equipo se coronó como jugador una sola vez en la liga, pero que como entrenador consiguió cuatro títulos de liga y la primer Copa de Europa para el club azulgrana en 1992.
"Demostramos al mundo que puedes divertirte mucho como futbolista, que puedes reír y pasártelo en grande. Yo represento una época que dejó claro que el fútbol bonito es divertido y que, además, con él se conquistan triunfos" Johan Cruyff.
El Mago, fue el cerebro y comandante detrás de la Selección Holandesa que disputará el mundial de Alemania 1974 la “ Naranja Mecánica” equipo dirigido por Rinus Michels alcanzó la excelencia y ganó este sobrenombre debido al color de su playera color “naranja” en honor a la monarquía Holandesa re-instaurada en 1814 por Guillermo I de Orange y a su estilo de juego, que muchos definen era como una locomotora “mecánica”.
Años antes en 1971 el cineasta norteamericano Stanley Kubrick estrenó su cinta “A Clockwork Orange” convertida hoy día en cinta de culto y que se encuentra basada en el libro del mismo nombre escrito por Anthony Burgess en 1962.
La coincidencia entre esta cinta y la Holanda del 74, se da únicamente en el nombre, sin embargo visualicemos en el imaginario una escena cinematográfica hecha por Kubrick, viendo al Tulipán de oro, driblar por el rectángulo de juego al compás de las melodías de Beethoven, a un magnánimo y carismático Cruyff “DeLarge” acompañado de sus drugos Van Hanegem, Rep y Rensenbrink con su estilo de juego irreverente, destrozando defensivas, haciendo de las suyas a placer.
La cinta filmada por Kubrick en Inglaterra recuerda la frase de Cruyff al referirse al fútbol inglés, afirmando que este evolucionó a partir de la llegada a su liga, de jugadores extranjeros.
“Todo esto lo digo en serio, oh hermanos míos, pero lo que hago lo hago porque me gusta”. Alex DeLarge
El legado del Holandés Volador va más allá de las estadísticas y formas de juego, Cruyff, siempre destacó por ser un gran orador, pero también por ser un crítico social, coherente con sus ideales y hombre de familia. Siempre álgido en sus comentarios El Flaco renunció por decisión propia a jugar la Copa del Mundo de Argentina 1978 con Holanda a pesar de disputar la etapa clasificatoria.
“Conoce a tu enemigo y conócete a ti mismo; en cien batallas, nunca saldrás derrotado”. Sun Tzu.
Mucho se rumoreó al respecto, desde si se debía a su postura política respecto a la dictadura militar que vivía Argentina en aquel momento, hasta una guerra comercial entre marcas deportivas.
La verdad fue revelada en 2008 en una entrevista para Catalunya Radio, respondiendo a Carles Rexach al respecto. En dicha entrevista Cruyff reveló que derivado a un secuestro que sufrió durante 1977 en su casa de Barcelona, es que decidió no asistir a la justa mundialista del 78:
"Charly debe saber que tuve bastantes problemas al final de mi época como jugador aquí y no sé si sabe que en ese momento vino alguien con un rifle a mi cabeza, estaba atado, mi mujer atada, los niños en el piso de Barcelona... Hay momentos en que hay otros valores en la vida", explicó,
"También era el momento en el que quería despedirme del fútbol, tenía la mentalidad de dejarlo, y no podía jugar sabiendo esto. Creo que para jugar un Mundial hay que estar al 200 por ciento, así que no tenía sentido", concluyó.
El secuestro le cambió la vida, dejando de lado su carrera deportiva, sobreponiendo todo por la seguridad de su familia. El resto es historia.
Johan Cruyff es más que una leyenda del fútbol, cimentó las bases de un Barcelona de época, que se construyó con Louis van Gaal y Frank Rijkaard, que alcanzara la perfección de la mano de Guardiola, Messi, Iniesta y Xavi.
Hombre simple y directo, no gustaba ser parte de los reflectores más de lo necesario, que explicaba su visión de vida a partir de un esférico. Su número 14 hoy retirado por el Ajax que saliera de los entonces tradicionales esquemas numéricos, será por siempre testigo del genio adelantado a su tiempo, que quizás pocos lleguen a entender pero como él mismo lo dijo:
“Si yo hubiera querido que me entendieras, me hubiera explicado mucho mejor” Johan Cruyff.