De ningún lado a través de la caravana, alrededor de una fogata, una mujer encantadora en movimiento, con el pelo tan oscuro como la noche, sus ojos eran como los de un gato en la oscuridad, eso me hipnotizó con amor. “Gypsy Woman”, The Uniques
Un hombre que tratar de apoderarse del amor contenido en una mujer, susurrar, cantar en su oído, llevarse su sonrisa. Pareciera que los cantantes de rocksteady permanecieron inundados de adrenalina y demás químicos segregados por ese cerebro enamorado. Un estado de adicción, inmejorable estado para producir música.
El trasfondo artístico recae en el amor, en un hombre, en una mujer. Una suerte de musa, un reactor que genera el despliegue de los más encarnados sentimientos. Muchos de ellos en forma de steady, meloso, dulce rocksteady, amable y lindo rocksteady.
Echen oreja a estas piezas para acompañar ese estado de enamoramiento.
En la línea del tiempo el steady llega después del ska en los tardíos 60, y es una pieza que pudo afianzar al siguiente eslabón; el reggae roots. Sus cánones se asemejan en la composición instrumental de éste último; bajo, batería y una guitarra. Musicalmente, la línea de bajo que el ska heredó del R&B de Norteamérica se volvió más rota. El steady no toca con el mismo énfasis cada tiempo, a la vez el bajo y la batería se hicieron más abultados.
Desde el momento en el que apareció el género se notó más refinado, con ello logró refrescar la escena atiborrada de ska. Su cadencia y pasividad lo volvieron más sensual al bailar, el steady no rebasa los 100 bpm. Los estilos en las voces, son heredados de la tradición de conjuntos vocales estadounidenses -muchos de ellos conocidos por las ondas radiales desde Nueva Orleans, Miami que llegaban hasta Jamaica-, la mayoría de estas bandas enraizadas en un sonido Rhythm & Blues. Reinterpretacion de Prince Buster a “Sharing You”, original de la norteamericana Mitty Collier, The Jamaicans, The Heptones, The Versatiles, The Paragons, The Valentines, The Ethiopians, The Tennors, The Gaylads, The Uniques, The Techniques, The Paragons, o que tal la prominencia vocal de Slim Smith, Derrick Morgan, Owen Gray, Derrick Harriott, Hopeton Lewis, los destellos de Ken Parker, la presencia femenina de Phyllis Dillon y Dawn Penn, el imprescindible Alton Ellis, y el músico arreglista que permanece sobre el pedestal; Lyn Taitt.
Todos ellos cantaban al amor de una manera desenfrenada. Hoy gracias a la palpable globalización de la cepa reggae, es relativamente fácil encontrar exponentes en varios puntos. California alberga uno de los sellos cuya incipiencia hace creer en que los gloriosos tiempos del rocksteady pudiesen florecer nuevamente. Escuchen la voz de este ángel llamado Jackie Méndez, el cover es a Roy Panton y su “Endless Memory”.
Que tal este cover a “I’d Rather Go Blind”, una rola de Ellington Jordan interpretada por Etta James. Esta versión es de The Frightnrs.
Aunque la adopción de la música de Jamaica en Inglaterra ocurrió desde la aparición del ska, la diversificación étnica entre estas dos islas se agudizó para la segunda mitad del siglo pasado. La Mancomunidad Británica de Naciones (desde 1952) impulsada por la independencia de la isla caribeña diez años más tarde favoreció relativamente el acceso de inmigrantes jamaiquinos hacia Inglaterra, con ello el intercambio cultural aumentó.
Específicamente el “Skinhead Reggae” o “Early Reggae” fue asimilado fuertemente en muchos suburbios, convirtiendo en ídolos a muchos de sus exponentes. Fue evidente que una nueva etapa de la corriente avivó otros suelos fuera de Jamaica.
Realmente el Steady tuvo un tiempo de apogeo muy corto, poco menos de 5 años . Es multifactorial ésta difuminación, se puede decir que la evolución de la música en Jamaica y cada vez más su compleja elaboración instrumental dejaron al Steady como una estela. El amanecer del reggae comenzaba, el amor fue relegado por el descontento social y la conciencia negra en nuevas composiciones.
Derrick Harriott, cantante y productor de bandas como Dennis Brown y Keith & Tex, ha declarado que la era Rocksteady fue la etapa más gloriosa de la música jamaiquina. Precursora y madre que engendró a un estilo de magnitudes continentales poco tiempo después, cuyo ADN ensimismó el sentimiento más puro y bello contenido en una persona; el amor.