La película de la semana: 'Blanco de verano'
Mas allá de los premios que entregan, los festivales de cine sirven, muchas veces, para darle a las películas una visibilidad que de otra manera no tendrían.
Buen ejemplo de ello es Blanco de verano, sólida ópera prima del director mexicano Rodrigo Ruiz Patterson que, tras pasar por Sundance, FICUNAM y Morelia, y ganar varios premios en Málaga y Lima, se estrenó hace unos días en la cartelera comercial de nuestro país.
Construída a partir de la aparentemente idílica y cercana relación de una madre soltera y su hijo, que hacen todo juntos y comparten una intimidad y confianza poco común, Blanco de verano es un estudio de personajes que revela los vicios y secretos de una familia que podría ser la de muchos.
Detrás de la ausencia de la figura paterna y de lo que en un principio se adivina como complicidad y afinidad se esconden la codependencia, los celos y diferentes tipos de violencia. Todo provocado por la llegada del nuevo novio de la madre que irrumpe en el paraíso donde un hijo adolescente siente que pierde su lugar y privilegios.
Frente a los cambios rebelión, ante la falta de atención incendios emocionales.
Nuevos límites que traerán nuevos conflictos, confrontaciones y problemas. Todo contado desde una mirada cercana que se aleja de los lugares comunes, los diálogos instructivos y los discursos aleccionandores.
Blanco de verano se puede ver ya en Cineteca Nacional, Cine Tonalá, Cinemanía, La casa del cine y complejos de Cinepolis y Cinemex en varias ciudades del país.
El More.
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