Mucha tinta en la Primera Convención de Tatuajes de la CDMX

Poner tinta bajo la epidermis es una práctica que en los últimos años se ha vuelto popular. No hacen falta cifras, la sociología espontánea evidencia el creciente gusto por los tatuajes. Los más críticos observan el fenómeno como una moda pasajera; otros, ven la posibilidad de incorporar signos y símbolos de forma permanente a su existencia corporal.

De cualquier forma, es claro que la libertad individual de decidir sobre el propio cuerpo va en aumento, mientras que el prejuicio pierde peso. Sin embargo, aún persisten algunas inquietudes respecto del proceso, materiales y cuidados que implica realizarse un tatuaje. Una decisión tan importante no debe tomarse a la ligera, lo recomendable es consultar a los expertos.

La gente siempre te juzga, no importa si tienes tatuajes o no. Puede ser por tu apariencia, por cómo vistes, por tu cabello, en fin. Todos somos diferentes, lo importante es que te aceptes tal como eres. (...) Mi tatuaje favorito es el de un gato (brazo derecho) porque representa a mi familia”.

Martha, 24 años, Ciudad de México.

 

La Primera Convención de Tatuajes de la Ciudad de México fue una buena oportunidad para que el público en general se despejara de dudas. Se les abrió la posibilidad de ver trabajar en directo a tatuadores profesionales y de platicar con ellos. Para los más experimentados fue una convivencia. La comunidad de la tinta, aquella que comparte el entusiasmo por el diseño y el color en la piel, pudo observar el alto grado que la técnica ha alcanzado.

El 4 y 5 de febrero distintos estudios reconocidos de la capital y del interior de la república trasladaron sus centros de operación a Expo Reforma. Y aunque el número de asistentes superó por mucho el estimado por el comité organizador y pese a las dificultades logísticas que ello implicó, en general, la gente agradeció este evento.

Llevo casi 10 años tatuando, y me gusta hacer el realismo en black and grey. Entré al tatuaje por medio del graffitti, empecé a pintar las calles desde los 14 años. (...) En revistas veía a los tatuadores y me llamaba muchísimo la atención. Desde niño he dibujado y aunque me costó mucho entrar en el medio, la principal dificultad que tuve fue agarrar la técnica”.

Jonathan Pérez, tatuador en Black Flag Studio.

Se presentaron más de 180 expositores. Además de los stands con reconocidos tatuadores como Laura Aguilar, Juan Garcia, Sergio Martinez, Juan Valladares, Indio Reyes y Anibal Pantoja, hubo venta de máquinas eléctricas, tintas, ropa, motos, comida, cerveza y música en vivo. The Wookies, Los Viejos, Los chilangos y Los de Abajo, fueron los responsables de poner a bailar a la gente.

 

 

Jesse Baez, Santa Bandida y Cruz Cafuné rompen corazones con el remix a “922 & Heartbreak”.

Vibraciones de la radio en México - Día Mundial de la Radio.