Reabre el MIDE con exposición sobre el impacto económico de la COVID-19
Exposición sobre el COVID-19 en el Mide. Fuente: cortesía del Museo
Después de tres meses de espera, el Museo Interactivo de Economía (MIDE) vuelve a abrir sus puertas al público con una exposición temporal titulada: El impacto de lo invisible, la cual nos invita a reflexionar sobre el impacto económico, emocional y personal que ha tenido la pandemia en nuestras vidas .
“Se trata de una exposición diseñada para entender el momento que la sociedad vive y que, sin duda, marcará un cambio significativo el cual podrá encontrar nuevas oportunidades hacia el futuro”, informaron las autoridades del Museo en un comunicado.
Conscientes de la crisis económica, el museo ofrece una reducción en el costo de sus boletos a 50 pesos por persona –antes el precio era de 95 pesos–. Su compra se puede realizar en la taquilla o por medio de la plataforma web del museo.
Para garantizar la seguridad y tranquilidad de los visitantes, el MIDE implementa todas las medidas sanitarias pertinentes:
Uso obligatorio de cubrebocas (visitantes y personal)
Personal capacitado para atender las necesidades de los asistentes.
Toma de temperatura antes de ingresar a las instalaciones
Dispensadores de gel antibacteriano
Señalizaciones
Tapetes para higienizar el calzado
Estaciones de desinfección en cada piso
Limpieza constante de instalaciones
Indicaciones sobre distancia mínima
Algunas de las medidas sanitarias en el MIDE. Fuente: cortesía del Museo
El duro golpe de la pandemia en el sector cultural
La pandemia ha afectado al sector cultural y artístico de una manera sin precedentes a lo largo y ancho de nuestro país.
Acorde con datos del INEGI , el 93.2 por ciento de las empresas registró al menos un tipo de afectación debido a la contingencia sanitaria y la mayor afectación fue la disminución de los ingresos, con 91.3 por ciento.
El golpe fue muy fuerte para los museos, esto llevó a que algunos empleados se vieran en la necesidad de buscar ingresos en otros gremios para completar el gasto. Al mismo tiempo, para continuar ofreciendo sus servicios, varios recintos culturales migraron a las plataformas digitales o implementaron algún otro tipo de medidas para hacer frente a la crisis; sin embargo, muchos se las han visto negras, al grado de estar en riesgo de desaparecer por no contar con los recursos necesarios.
“Sin duda, la comunidad cultural y sus instituciones serán uno de los sectores más golpeados. Siempre se vive al día y en la precariedad y no son prioridad para ningún gobierno”, declaró Ana Elena Mallet , profesora de la Escuela de Arquitectura, Arte y Diseño del Tec de Monterrey.
