Bajan las temperaturas, anochece más temprano, desempolvamos bufandas y sabemos que ya hemos llegado al otoño. Y conforme se dan estos cambios, también sabemos que se aproximan las tradiciones de octubre y noviembre— específicamente Halloween. Si comprendemos éste desde la tradición norteamericana, gira en torno al horror, los fantasmas,lo raro y lo espeluznante. Esta tradición se ha globalizado y ha llegado a México, situándose en una fecha muy cercana al Día de los muertos. No obstante, no podemos caer en la antigua falacia de que éstos son comparables o que el Día de los muertos es el “Halloween mexicano.” Las tradiciones y sus raíces provienen de fuentes drásticamente distintas. Con la expansión del Halloween al resto del mundo, hemos llegado a asimilarlo como una fecha en la que nos disfrazamos, asustamos y recogemos dulces. Pero también es el momento propicio para juntarse y contar historias de terror.

Bien es cierto que todos tenemos un morbo muy adentro; éste nos lleva a buscar emoción en el susto. Por una razón más extraña que el horror mismo, disfrutamos mucho de entretenernos con el horror. Cada persona se asusta con sus diversos demonios, pero si en algo podemos concordar es que aquello que da miedo es lo que nos saca de nuestro horizonte de expectativas, aquello que se sale de los límites de lo conocido. Según Sigmund Freud, a esto se le llama unheimlich (en alemán: heimlich es el hogar, un-heimlich es la negación de éste) que se ha traducido al español como lo ominoso lo siniestro. Cualquier cosa que se salga de nuestro ideario de lo familiar nos asusta; nos asusta aún más algo que nos es familiar y que se trastoca por un elemento desconocido.

La tradición es juntarse la noche de Halloween a ver películas de terror (y ahora, hasta series, como Stranger Things) pero nada supera el sentimiento de horror que produce sentarse a leer un relato de horror bien construído. Aquí les ofrecemos 10 opciones de cuentos que exploran distintos matices del horror.

La gallina degollada- Horacio Quiroga: Un cuento cuyo elemento tenebroso está en lo monstruoso y sanguinario.

El huésped- Amparo Dávila: Este cuento te dejará pensando muy bien la próxima que aceptes a un invitado en tu hogar.

There are more things- Jorge Luis Borges: Un cuento sobre monstruos narrado de una manera que sólo Borges podría.

The Story of the Late Mr. Elvesham- H.G. Wells: Prepárate para vacilar y cuestionarte en torno a lo que acabas de leer

El jorobadito- Roberto Arlt: Otro cuento sobre la tradición de lo monstruoso en lo humano

¡Diles que no me maten!- Juan Rulfo: Un relato corto que produce angustia y desesperación en el lector

La casa encantada- Virginia Woolf: El horror se construye a partir del espacio en este espeluznante relato de Virginia Woolf.

La debutante- Leonora Carrington: La famosa pintora trae a la literatura su visión de lo surreal en un relato que conjuga el horror con lo animalesco.

La fiesta brava- José Emilio Pacheco: Un cuento que pertenece a la tradición de lo fantástico latinoamericano, supone un viaje en el tiempo, entre extrañas escenas de horror.

Los muertos- James Joyce: ¿Quién dice que en el amor no cabe el horror? Un bello relato sobre una fiesta en la los personajes se trastocan fuera de nuestro ideario.