#LaMúsicaNosNecesita: Surge el Proyecto Música México COVID-19
Pocos días antes de que el Vive Latino 2020 se llevara a cabo, alrededor del puente vacacional por el natalicio de Benito Juárez, la expansión de contagios en México por coronavirus era un temor latente que dividió a la opinión pública entre aquellos en contra de la realización del festival de música y los que estuvieron a favor de la no suspensión del evento.
Precisamente en Vive Latino, un grupo de personas que son parte de instituciones estratégicas de la música grabada en México, vislumbraron un panorama donde los grandes eventos masivos serían suspendidos totalmente en nuestro país. Evidentemente los pequeños showcases que no superan el millar de asistentes, también fueron suspendidos cumpliendo la visión de aquellas personas. Así surge la iniciativa Música México COVID-19, que tiene como fin reconocer el daño a la economía de los involucrados en la industria musical mexicana, particularmente de aquellos dedicados al sector de los eventos masivos.
Comenzó hace unas semanas como el sitio web www.musicamexicocovid19.com, donde se aglutina la información recabada directamente de los afectados, a través de una encuesta donde los miembros de esta iniciativa piden a todos aquellos que hayan perdido sus empleos, cancelado conciertos, cerrado sus tiendas, dejado de producir discos, grabaciones o que sus ventas se vean disminuidas debido a la pandemia en México, para llegar a la información más veraz y estadísticamente precisa posible.
Partiendo de la premisa que hay muchos trabajadores en la industria musical mexicana de los que no se tiene registro, el hecho mismo de que la mayor parte de afectados responda el cuestionario, es latente para la realización de las etapas posteriores de la iniciativa, donde se pretende crear un fondo para poder apoyar a quienes soliciten ayuda financiera y comprueben que efectivamente sus labores se suspendieron a raíz de la cuarentena y la implementación de políticas de sana distancia. Este fondo que es una de las fases posteriores a la fase estadística ya ha sido beneficiado por artistas con una situación financiera privilegiada, específicamente por el intérprete Alejandro Fernández que ha donado una parte de los ingresos de su último single a este fondo.
Otros medios para la obtención de recursos se han planteado como la rifa de memorabilia musical, algunos mecanismos propuestos por plataformas digitales las cuales no han dejado de operar e inclusive las donaciones directas de los fans. Cuando los eventos son inminentes y fortuitos, ni los más preparados estarán ciento por ciento listos para contingencias emergentes, tal es el caso de la industria musical mexicana la cual abarca una enorme cadena de valor, distribución y suministros.
Una industria que comienza desde el compositor de un tema, hasta la impresión de boletos para el espectáculo que tendrá aquel tema compuesto y se haya convertido en un éxito. Productores de música, músicos, arreglistas, maquiladores de formatos físicos, vendedores formales e informales de éstos formatos, promotores, label managers, directivos, personal de ventas, de marketing, promotores de conciertos, bookers, locutores de radio, VJs, programadores, periodistas musicales, editores, redactores, maquiladores de merchandise y un sinfín más de personal que la industria de la música les ha ofrecido empleo de manera directa e indirecta.
La industria en México, la cual es una de las industrias musicales más importantes del mundo, no ha sido reconocida como un sector predominante de las industrias culturales mexicanas. A diferencia de los productores de cine o de medios impresos el rubro musical mexicano no cuenta con fondos, institutos, becas, estímulos fiscales, polémica que viene arrastrándose con las autoridades culturales y legislativas correspondientes desde hace muchos años.
Los involucrados directos en esta iniciativa son la Universidad de Guadalajara (UDG), la Asociación Mexicana de Productores de Fonogramas (AMPROFON) y Discos Casete Agricultura Digital.