¿Cómo superar la pérdida de un ser amado? Día 3 en la FIL de Guadajalara.

¿Cómo superar la pérdida de un ser amado? Día 3 en la FIL de Guadajalara.

La gente es odiosa, insoportable, y más cuando se nos ha programado mediáticamente para ser misántropos, conseguir nuestra propia burbuja, aislados en un auto, imaginar que no existe el tránsito, que la persona que roza el flanco izquierdo en el metro no es persona, es una masa de carne incidental que el destino colocó ahí, pero no estamos acompañados, estamos solos. No queremos estar acompañados, salvo por nuestros sueños, frustraciones, mundo interno, del cual forman parte las mascotitas. Con ello, la pérdida de un amigo o familiar, puede convertirse en un desbalance, que puede traer consigo tristeza inconmensurable. Este sentimiento no es exclusivo de alguna región, lengua, credo o etnia, sino forma parte de la naturaleza humana. Pero, peeero, si es una mascota, que el mundo se detenga. Temas como este, no son ajenos a la estantería de la FIL. ¿Me has visto? (Editorial La Cifra, 2017) es una novela gráfica que narra la pérdida de Nai Wen Kuo, su gato adoptado de la misma calle. Bellamente ilustrado por Zhou Jian-Xin, este libro logra poner sobre la mesa un tema como el duelo, convirtiéndose en el bálsamo que ayudó a Nai Wen a lidiar con su pérdida. Aunque la verdad es el egoísmo de saberse rechazado por esa bola de pelos, que lo lleva a imaginar que quizá voló, quizá se desintegró, quizá huyó, antes de aceptar que el gatucho tiene voluntad propia.

Un libro 99% ilustrado que carece en su mayoria de texto, pero que cierra con un par de líneas de forma intencional.

En realidad la idea de la carta nace al final, justo cuando terminamos la ilustración, lo platicamos con la editorial y es una forma de cerrar lo que queríamos explicar con el libro, y de alguna forma también representa lo que nunca pude decirle a mi gatito”.  

La técnica y el proceso narrativo  como medios de comucación deben de comulgar fusionando ambas técnicas determinando el impacto que tengan sobre el lector:

“En Taiwan ciudad a la que pertenecemos, la aceptación ha sido buena aunque lenta, ya que aún están acostumbrado a formatos con una mayor cantidad de texto por sobre los que solo son graficos, aun nos está costando romper esos estereotipos. Sin embargo en México ha sido todo lo contrario, sobre todo porque la gente se acerca y nos cuenta sus historias con sus gatos, eso nos parece increíble”

La técnica lo es todo...

Para este libro he utilizado una técnica de ilustración a lápiz que se presta muy bien para el nivel de detalle que requiere esta historia”.

Poco más 9375 km existen de separación entre Guadalajara y París, aunque un mar las separa la letras unen corazones. Y fue así que llegó hasta la FIL 2017 Muriel Barbery, a presentar su libro “L'Élégance du hérisson” (La elegancia del Erizo, Seix Barral, 2008). segunda novela de la escritora y que casualmente al ser un libro lleno de ensayos y cuentos no cuenta con ninguno que haga referencia al título mismo:

“Extrañamente el titulo llego al final lo primero que llegó fue el personaje de este conserje, que también está presente en la novela que le antecede y fue muy natural que llegará también a este libro, y en mi casa tengo una biblioteca muy completa cuando conocí a la protagonista lo único que tuve que hacer fue dejarme llevar por sus pensamientos”.

Es común que en el mundo existan más preguntas que respuestas, la muerte vista no como el fin de un ciclo, sino como el incentivo a seguir viviendo:

“Sencillamente porque todo mundo se pregunta ¿Cúal es el sentido de esta vida? si esta vida es muy corta y para intentar comenzar a resolver esta pregunta es necesario iniciar escribiendo trescientas páginas”. Muriel Barbery.

¿Qué tanto se lee en México? es la pregunta común en toda feria del libro, o lugar donde más de dos escritores se reúnan, incluyendo el Covadonga; para después asentir que no se puede leer todo; para después alardear que se leen uno al otro; para después presumir que jamás han leído best sellers.

No todo en la FIL son buenas noticias, Carlos Anaya Rosique, director de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, dio su diagnóstico sobre el año 2016; donde hubo una reducción de la producción y de la venta. Enfrentandonos a la realidad que en México los libros son inaccesibles en la mayor parte del territorio; dada la casi inexistencia de librerías así como las pocas bibliotecas públicas, que de acuerdo a Rosique, no tiene el presupuesto suficiente para la adquisición de libros simplemente para el gasto corriente.

Habríamos de preguntarnos, ¿De qué sirve enaltecer el acto de la lectura sino hay libros a los cuales acceder?, según Rosique, casi todas las librerías se concentran en el centro del país, habiendo una terrible ausencia en el Norte como en el Sur. También nos advierte que el panorama del 2017 presume ser mucho más serio, dado que se borro todo presupuesto para fomento a la lectura. El director de la CANIEM, advierte que la lectura es una cuestión que no sólo se arregla con campañas publicitarias sino con política pública, que haga accesibles los libros y posibles los costos de operación de tanto librerías como Bibliotecas Públicas.

Es increíble las posibilidades de encuentros editoriales dentro de la FIL; pero no llega a ser una medida suficiente para poder hacer de la lectura una actividad cotidiana de tantos estudiantes y ciudadanos, si el libro siguen siendo un objeto inalcanzable. Habríamos de cuestionar, ¿Por qué siempre es el presupuesto a Educación y Cultura el que queda relegado ante otros, como Comunicación de Presidencia?

El Inconcebible Universo. Sueños de Unidad (Sexto Piso 2017) de José Gordon, es un libro que alimenta la literatura con la temible ciencia. No desde el discurso escolar, sino con la curiosidad del científico que alimentó a Einstein y Borges. Es una provocación para que nuestras mentes dejen atrás el determinismo de las disciplinas, tomándonos por sorpresa las posibilidades que ofrece combinar la literatura con fines científicos, además es una propuesta en contra del aburrimiento, donde uno juega con el libro por medio de códigos QR que nos llevan a videos y nuevas formulaciones del libro. Básicamente es una oportunidad de jugar con Einstein, Schrödinger, Borges a universos paralelos y a creer que la ciencia no es tan determinista, sino es otra forma literaria de entender la realidad.

No habría que decir más, excepto que la conversación con Pepe Gordon, es maravillosa; provoca en uno la alegría infantil por querer saber más; él representa el verdadero espíritu del divulgador de ciencia. Su trato es amable, paciente, a sabiendas que no son fáciles los conceptos comunes de la ciencia, mucho menos los más profundos, por ello tiene un trato amoroso.

Hacer literatura juvenil, no es fácil. Sobre todo si quieres hacerla con calidad y sin deslegitimar a los jóvenes. Es complicado encontrar verdaderos espacios de lectura para jóvenes;  la mayoría cae en versiones cursis y resumida de amores ya vistos mil veces o en lecciones moralistas simples y aburridas. De esta manera llegó Adolfo Córdova, con su antología de cuentos La hoguera de bronce (Secretaría de Cultura, 2017) que desde la Edad Media, pasando por los árabes en las mil y un noches hasta cuentos rusos, nos lleva por las posibilidades de la malicia y los paisajes de la selva, los bosques y las ciudades.

Atrapar desde la juventud en la riqueza de otros mundos a veces sólo posibilitado por la literatura es una tarea difícil, pero hacerlo con astucia es extraordinario. No se trata de vender historias fáciles a los jóvenes, sino de enseñarles las múltiples existencias que pueden ser vividas a través del lenguaje. Imagino a una joven descubriendo a Maria de Francia del S. XII, que es un misterio histórico pero un deleite literario, ¿cuánto podemos conectar con otros tiempos a través de las palabras?, ¿es sólo una gran ilusión o en verdad podemos llegar a conocer a otros a través de lo que escribe?...

El miércoles para nosotros fue un encuentro con las letras mexicanas tuvieron gran presencia. Escritores como Fernando Rivera Calderón, Emiliano Monge, Ana Clavel y Bernardo Esquinca platicaron con nosotros sobre sus más recientes obras y sus impresiones de la FIL. Con Rivera Calderón fue similar a su libro de poemas Llegamos tarde a todo (Almadía, 2017), es decir, llena de humor y sarcasmo. En este libro, el autor juega con algunos tópicos y clichés poéticos para trastocarlos de forma burlona. También, hablamos sobre la participación de Alejandro Magallanes en la obra, ya que sus ilustraciones para los poemas complementan la palabra escrita en un ejercicio lúdico para los artistas y el lector. Ya al final, cerramos la conversación con una canción de Monocordio, grupo al que pertenece Rivera Calderón. Quien esté interesado de ver una obra donde el arte es un juego, debe acercarse a Llegamos tarde a todo.

El erotismo, las fronteras entre parafilia y perversión, así como otros temas que envuelven el concepto Lolita, que ha sido motivo de interés para varios autores además de Nabokov, desde Lewis Carroll hasta Lars Von Trier, son los puntos que desarrolla Ana Clavel en su libro de ensayosTerritorio Lolita(Alfaguara, 2017).

Un esfuerzo por juntar en un solo archivo apuntes que la autora tenía acerca del tema, son el motor para lo que resulta una investigación exhaustiva

Y retomando la cuestión de ¿para qué sirve enaltecer el acto de la lectura si no hay libros a los cuales acceder? Porque es necesario salir de nuestro imaginario para poder colocarnos en el de otros, ser empáticos a través de las experiencias vividas por otras personas en otros tiempos, en otros lugares, porque la lectura despierta una sed de conocimiento que una vez que se tiene difícilmente es saciada. Porque leer es vivir. Punto de coincidencia con Ana Blandiana, Gilma Luque y Bibiana Camacho quienes, en distintas ponencias enaltecieron el mismo punto.

Bernardo Esquinca nos habló de Inframundo (Almadía, 2017), la cuarta entrega de su saga Casazola, cuyo protagonista es un detective que se ve inmerso en distintos mundos fantásticos y policiacos. Hicimos una importante diferenciación entre este tipo de literatura y el mercado editorial juvenil, de tópicos y fórmulas recicladas, ya que el trabajo de Esquinca se alimenta de la investigación histórica y bibliográfica para que el lector se sienta acogido por la trama a partir de referencias de la conquista española y de las manías que tienen los asiduos visitantes de las librerías de viejo de la calle de Donceles en la Ciudad de México.

Una de las actividades que se deben destacar es la serie de lecturas "Latinoamérica Viva", donde los autores más jóvenes y talentosos pueden difundir su trabajo que busca nuevos lectores fuera de su país. Una mesa que llamó la atención fue la moderada por la puertorriqueña Mayra Santos-Febres, y en la que participaron la chilena Claudia Apablaza, el peruano Johann Page y el brasileño Carlos Henrique Schroeder, quien habló en portuñol. La puertorriqueña hizo un resumen de la obra de los 3 autores y descubrió que el tema familiar es recurrente, pero recordando más las disfuncionalidades que las dichas, como "Un museo del rencor" resumió Schroeder. Una plática que se extendió bastante y que concluyó con la "la pregunta más inteligente que he escuchando en la FIL", en palabra de Santos-Febres, y que fue hecha por una adolescente que visitaba la feria con su escuela: ¿qué es aquello que les dice que deben seguir escribiendo? La respuesta más emotiva fue la de la puertorriqueña, quien respondió que su impulso para continuar con este camino es para vencer a esas voces internas que le dicen que su trabajo no vale la pena, voces que seguramente fueron reales en su juventud.

Un tercer día lleno de conversaciones, encuentros y descubrimientos, cosa que sorprende si tomamos en cuenta que llevamos más de 72 horas de compartir el mismo aire, tiempo y espacio. Cientos de personas reunidas en el mismo sitio y que le ven los rostros a otros miles durante varios días en los que toca hacer labor de venta. Otra vez, no somos misántropos.

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