Bandalos Chinos ofrecen noche inolvidable en el Teatro Metropólitan
Dicen que el 7 es un número de la suerte y vaya que sí. El 7 de julio pasado la Ciudad de México tuvo un poco de todo. Sol, lluvia y, sobre todo, un plan perfecto por la noche: el concierto de Bandalos Chinos en el Teatro Metropolitan.
El reloj marcó las 21 hrs. y comenzó un show digno de dos horas y media a cargo de la banda que esa noche hacía su primer sold out en la CDMX.
Las luces se apagaron, los gritos del público se hicieron presentes y de repente, empezó a sonar “Mi Fiesta”, parte de su nuevo material El Big Blue. Todos comenzaron a bailar y a corear “No voy a invitarte a mi fiesta…” , parte irónica del show, porque la fiesta acababa de comenzar y los invitados vaya que estaban de gala.
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Las palabras de Goyo (vocalista del grupo) saludando y abrazando al público generaron un grito interminable. Inmediatamente después comenzó “Sin Vos No Puedo”.
Por supuesto que el show necesitaba estrellas e invitados, y Daniela Spalla subió al escenario entre la euforia del público para, no solo cantar, sino bailar con él, sin importar si se conocían o no, pues la canción que sonaba era “Bailando Lento”.
“¡Qué energía traes, México!”, gritaron. Además, no faltó quien aventó un ya emblemático Dr. Simi al escenario. Goyo estaba feliz viendo lo que sucedía.
Durante el concierto también hubo rolas tristes, pero necesarias, como “Demasiado” que el público acompañó cantando a capela y con las luces de sus celulares.
Cerca del final sonó “Departamento”, y como en el video de esta canción, Adán Jodorowsky salió a cantar y bailar con su típico traje de plata. A pesar de que todos estaban en el Teatro Metropolitan, estar tirados en la cama de un departamento se sentía real…
Tras una pausa de 10 minutos de gritos y porras necesarias, las luces apuntaron al fondo del lugar y, de repente, Goyo salió a escena con un traje que se distinguía a la distancia, “El Ídolo” sonaba en el recinto.
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Al momento de cerrar el show, los músicos hicieron bailar, temblar y sentir que no pasó el tiempo, llenaron de alegría, nostalgia y lágrimas al público.
El concierto acabó a las 23:30 hrs. Sin embargo, el tiempo se fue como agua mientras los Bandalos Chinos estuvieron en el escenario. La banda marcó la noche de las y los asistentes, que seguramente, ya sea camino al Metro o a su coche, se fueron tarareando canciones que tocaron su corazón esa noche.
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