Por Sofía V. (@sofiavim)
Ojos cerrados, los labios entreabiertos. La mano, levantada justo a la altura de la boca, contiene un pedazo de magia de chocolate hecho por la banda que está al frente. Los beats invitan a que ese trozo haga contacto con la lengua, y se haga la liberación de los elementos que desinhiben el movimiento corporal y mental; se dejan ir los pasitos de punta de pie alternada y las manos que se menean junto a las caderas que marcan el compás. Sólo es el comienzo.
El Gran Maestro orientó a Timothy Brownie a que se tomara de las manos con Fania Records. Así, estrenaron este año su primer trabajo en conjunto, el EP Buffalo Beat. Dentro de las maravillas encontradas en esta publicación está “Psicomagia”, y el video contiene características poco terrenales. Posee la capacidad de transportar al espectador a un mundo completamente diferente, en donde lo que se nos ha enseñado como normal desaparece y surgen imágenes que se asimilan como alucinaciones porque –como dice el maestro Alejandro Jodorowski, acompañante vocal de esta pieza–: “hay que enseñarle a la razón a hablar el lenguaje de los sueños.”
Los ojos se abren y comienzan transitar delfines rosas, verdes y azules. Árboles en negativo, hongos que se anhelan, unos chapuzones que se envidian. Los colores revientan brillantes, invaden los dobleces del cerebro mientras el cuerpo ha alcanzado hibridación con lo que comenzó rebotando en los pliegues del oído externo, resbalándose por el canal hasta aterrizar en el tímpano y comenzar a vibrar, dando paso al contagio en todo el cuerpo, retumbando en los huesos dejando la corporeidad en trance para que el centinela pueda elevarse a un punto de goce máximo. Procesos vitales. Ritos y acciones.
https://www.youtube.com/watch?v=DpcWgD5Oit0