Por: Ale Nava Se acerca día de muertos y Halloween, para esto es necesario tener preparado el disfraz y la bolsita para ir a pedir dulces. La edad no es problema ya que siempre se vale acompañar al primo, sobrino o hermano, y esto tiene recompensas: poder comer unos cuantos dulces que haya recolectado a lo largo de la noche.
Esto es un termómetro de dulces para recordar o ir comprando los mejores dulces y no fallarles a los niños que llegan coreando “queremos halloween, queremos halloween” o que piden “calaverita”.
Nunca falta el que dice: “Perdón niños, no tengo dulces. Pero esto fue lo que encontré” y lo que deposita en la bolsita es cualquier tipo de fruta, una mandarina, una caña, cacahuates o hasta pastillitas de menta del restaurante (porque ha llegado a pasar).
Los peores dulces que llegan a dar son cualquier tipo de caramelo macizo, pero era el peor día cuando en la bolsa se encontraban las pastillitas de Laposse que tenían una pasita adentro o los caramelos de mantequilla. Los chiclosos, duros Tootsie Roll y los chicles Pal a los cuales se les va el sabor después de tenerlos un minuto en la boca tampoco se quedan atrás.
Después se encuentran los dulces miniatura, como los tamborines, picafresas, los miguelitos o los sugus sueltos, de estos sólo depositan de dos a tres en la bolsa de dulces. Por supuesto sin olvidar a los mazapanes que llegaban a casa todos aplastados. Otros dulces pequeñitos pero que son más del gusto popular como los Kisses, los Milky Way o Snickers, no eran los preferidos por su tamaño y la mayor parte del tiempo hacían falta algunos otros para saciar el apetito.
Las paletas y su miles de presentaciones: las manitas de la suerte, las Rocaletas, las de sandia con chilito, las de cajeta, de chamoy o las que son temáticas de halloween que saben a colorante artificial. A veces estaban rotas y terminaban por parecer más dulce que paleta. Pero los más comunes eran sin duda los Pulparindos, hasta se creaba un gusto por estos debido a su popularidad en todas las casas.
Para hacer bulto: Los malvaviscos, los Totis y los Cazares sólo se encuentran en las bolsas por el volumen igual que las Paletas Payaso o los Paletones. A pesar de esto no era problema alguno cuando se encontraban varios de estos.
Los preferidos por el tamaño y el sabor son los Bocadines, los Panditas y los Mamuts entre otros. Pero sin duda la noche se convertía en la mejor si por lo menos en alguna casa daban un Pelón Pelo Rico, un Huevito Kinder o hasta una bolsita individual que ya habían preparado con dulces variados.