El Plaza ya vestía de negro y la parafernalia no se hacía esperar: fanáticos de Kadavar compraban pósters autografiados que igualaban el precio del boleto de entrada, además de las playeras no oficiales que abundaban en las banquetas de la Condesa.
Pasadas las 9:00 PM empezaban los gritos de los asistentes que llenaban El Plaza en espera de la banda que regresaba por segunda ocasión a la Ciudad de México. Se escuchaba “Kadavar, Kadavar” rebotando en las paredes y la rechifla no se hacía esperar. Por fin se apagaron por completo las luces y sonaron los primeros riffs de “Lord of the Sky”, a la par de tres siluetas trazadas por las luces en el escenario. La mata y barba del baterista ondeaba con su ya característica energía.
Siguieron “Pale Blue Eyes” y “Stolen Dreams”, sin mucho discurso entre las canciones por parte del voca, lque a lo mucho se le distinguía un “gracias” en un mal hablado español.
La sobriedad y potencia de estos alemanes fue suficiente para que los fans alzaran las manos, corearan y matearan a la par de los sencillos de su nuevo más reciente álbum Berlin como “The Old Man”, que presume un grandioso y pegajoso riff de inicio a fin.
Con un lacónico “Thank you México City”, procedieron al encore que no duró mucho tiempo. Regresaron al escenario con “All Our Thoughts” y, para terminar esta retro/barbada velada, ”Come Back To Life”. Por último, el vocalista mencionó que ama tocar en esta ciudad y que seguro regresarán el próximo año.
Sin duda, una gran actuación de Kadavar, con seriedad y potencia ya características de este trio alemán. Sus fans tendrán la fortuna de repetir si es que el líder cumple con su promesa.
Por Edgar Olivares
Fotos por Fernanda Espíndola