[RESEÑA] Godzilla

Por Daniela Herrera (@ddherrera) Pocos monstruos llegan a los 60 años convertidos en un icono de su país de origen, y siendo tan bienvenidos en la cultura popular como el día de su nacimiento. Godzilla es uno de los pocos afortunados: lo hemos visto en películas (28 japonesas y 2 estadounidenses), series de televisión (13 producidas en Japón y 1 adaptación extranjera), comics, series animadas e incluso videojuegos en más ocasiones de las que la mayoría podemos recordar. A pesar de esto, la criatura sigue vigente y, como prueba, este año salió a la luz una nueva adaptación cinematográfica que la tiene como protagonista. Godzilla se estrenó el 15 de mayo y hay quienes ya afirman que podría convertirse en uno de los estrenos más taquilleros de 2014.

La trama no es nada nuevo, y evoca a las viejas películas sobre este ya bien conocido gigante dedicado a salvar al mundo de la amenaza de cualquier otra criatura. Sin embargo, el filme logra sorprender con un par de nuevos elementos que lo hacen una opción apta para complacer diferentes gustos, edades y géneros.

Godzilla Roar

En primer lugar, imposible dejar pasar desapercibida la actuación del protagonista, Aaron Johnson, a quien seguramente se le recuerda por su actuación en Salvajes y Kick-Ass. En esta ocasión, el actor da vida a Ford Brody, un miembro del ejército norteamericano experto en la desactivación de bombas y armas nucleares. Él es acompañado en la película por Elizabeth Olsen, quien ha dejado de ser conocida únicamente por ser la hermana de las gemelas Olsen, y hace el papel de la esposa de Brody. Otros nombres conocidos en el reparto son Bryan Cranston y Juliette Binoche. Las actuaciones no son nada fuera de lo común, bastante parecidas a todas las que hemos visto en decenas de películas de acción; sin embargo, no son malas y pueden considerarse como un punto neutro del filme.

El filme también cuenta con una fotografía que muestra paisajes imponentes y, en muchas escenas, un uso bastante llamativo de colores. De la misma forma, este elemento agrega a las tradicionales escenas de explosiones y peleas de las películas del género, un toque de peculiaridad al incluir (durante una buena parte de la trama), en el fondo, a un trío de monstruos colosales luchando entre la bruma. Por ejemplo, una escena que destaca por su genialidad es la caída de soldados paracaidistas por el cielo enrojecido para descender en un San Franciso semi-destruido y en llamas, al lado por supuesto de los gigantes protagonistas.

Para los fanáticos de este personaje, y que creen haber visto todo lo que puede ofrecer, la película también cuenta con algunas modificaciones de la historia original, siendo adaptada para convertirse en una versión moderna de esta clásico. En el filme se incluyen problemáticas más actuales y más intervención humana que en la mayoría de las versiones anteriores, en las cuales las aventuras de Godzilla poco tenían que ver con las personas. Podría decirse que en esta versión los verdaderos protagonistas son los humanos, sobre quienes recae gran peso de la historia.

La música, a cargo de Alexandre Desplat (quien ha compuesto para películas como Harry Potter, Luna Nueva y Los Miserables), recuerda a las caricaturas de superhéroes que todos vimos alguna vez en nuestra niñez, lo que le da al filme ese toque de que no ha olvidado por completo las raíces de este personaje. A pesar de eso, la musicalización de esta película en un intento de sonar épica cae en lo infantil, y en algunas escenas se siente un tanto fuera de lugar, por agregarle demasiado dramatismo a escenas en las que no era necesario.

A pesar de esos detalles, Godzilla es una obra hecha para complacer a toda clase de público y, que, a pesar de no ser una película basada en una historia innovadora, cuenta con los elementos suficientes para entretener y demostrar al mundo que aún tenemos a Godzilla para rato.

[RESEÑA]: "Quack" - Duck Sauce

Subunguis en el Teatro de la Danza del CCB