Por: Michel Medel (@michelmdl) Recientemente Sexto Piso editó Daniel Johnston por Daniel Johnston, libro que recopila la producción visual del artista de culto de la Generación X nacido en California, en 1961. Johnston es un síntoma de la degradación social y humana de la época, ha logrado sobrevivir a la opresión social, enfermedades mentales, antipsicóticos, LSD, diabetes mellitus tipo dos y refrescos de lata al por mayor, en buena medida gracias a su necesidad de crear, de expresarse: cualidades inherentes al ser humano.
Obtenidos de sus archivos personales, este libro recopila dibujos desde su juventud, hasta sus más recientes trabajos a gran escala y en acuarela. Algunas de las obras mostradas en Daniel Johnston por Daniel Johnston han sido exhibidas en la Bienal de Liverpool y en la galería Aquarium de Londres.
Con el libro en mano y su música de fondo, notarán que Daniel Johnston no necesita del establishment de las artes. En palabras de uno de sus comentaristas, Philippe Vergne, actual director del Museo de Arte Contemporáneo de Los Angeles (MOCA, por sus siglas en inglés) “su obra muestra una estética despreocupada, liberada y liberadora”. Sin lugar a dudas, su arte visual, colorida e infantil, está relacionada de manera indisociable con su trabajo como músico y compositor.
Sus trazos no son autorretratos, pero están cargados de una gran subjetividad. Sus personajes son seres salidos de la vida, la imaginación y la cultura de masas. Su estilo no se explica sin la influencia de las caricaturas infantiles y especialmente sin los cómics de la era dorada de Marvel, creados por Stan Lee en la década de los sesenta.
Con sus ilustraciones Daniel Johnston transmite una sensibilidad desnuda y sofisticada. Mutación e hibridación al mismo tiempo. La mayoría de los dibujos se complementan con textos encerrados en globos de diálogo. Las declaraciones son francas, sencillas y parecen funcionar en un nivel de verdad universal que cuestionan la vida y la muerte, el amor y la soledad, la salvación y el infierno. Algunos relacionan los dibujos de Johnston con la corriente artística de lo grotesco, que John Ruskin define como algo ”compuesto de dos elementos, uno absurdo y el otro horrible”.
En la iconografía de Johnston se hallan personajes recurrentes: la rana Jeremías, un alter ego de Johnston con las pupilas dilatadas que simboliza la inocencia; el Pato, que tiene buen corazón y siempre es de buenas intenciones; Sassy Fras, el gato que con el tiempo deviene una chica, luego un hombre, luego un superhéroe; una serie de monstruos buenos que son todos variaciones de individuos que luchan contra su incapacidad de socializar como Frankestein y Hulk. Criaturas satánicas o bestias, superhéroes como el Capitán América y personajes redentores como Casper, el fantasma amigable.
Esta riqueza de personajes encarna un mundo de tensiones entre el bien y el mal donde la fantasía parece el único escape viable y donde símbolos como El Capitán América significan el desvanecimiento de las jerarquías tradicionales y los órdenes establecidos. Su escape más próximo del fundamentalismo de la derecha política y religiosa.
A lo largo de la historia de la humanidad hacer arte ha sido una estrategia para sublimar pulsiones o resignaciones. Johnston no es la excepción, en sus trazos conforman el mapa de un reino de sombrías obsesiones, a la vez políticas y psicológicas, que giran en torno a la muerte, la redención, los desmembramientos y las frustraciones sexuales. Aunque a Johnston le encantaba Van Gogh y otros grandes artistas, en su obra no muestra ningún respeto por las reglas tradicionales de la composición y de la proporción.
Los dibujos de Daniel Johnston, al igual que su obra como cantante y compositor, se distinguen por una calidad rudimentaria, de “hágalo usted mismo”. Queda claro que no es un erudito ni un estúpido, sino un artista con toda la extensión de la palabra; además uno de los máximos íconos del folk y de la cultura pop underground. Su arte visual y su música, poseen una sinceridad extrema. Hermosas a su manera, con una profunda sabiduría de la existencia.
Alguna vez se preguntó Dostoievski ¿Qué es el infierno? Y se respondió a sí mismo que es el sufrimiento de no poder amar. Tal vez éste es el verdadero problema de Johnston, muy por encima de todas sus enfermedades.
Este sábado 17 de mayo Daniel Johnston se presentará junto con más de 50 bandas nacionales e internacionales en ocho sedes diferentes alrededor de las colonias Roma y Condesa, en el marco del Festival Marvin, en su edición 2014. Si desean conocer más sobre este artista de culto de la Generación X, Daniel Johnston por Daniel Johnston editado por Sexto Piso es una gran opción.
Ficha bibliográfica:
Daniel Johnston por Daniel Johnston
Con textos de Philippe Vergne, Jad Fair y Harvey Pekar
Año de publicación: 2014
Colección: Sexto Piso Ilustrado
Formato: 21.5x26.8 cm
Páginas: 156