Mogwai nunca morirá, pero tú sí

Mogwai nunca morirá, pero tú sí

DSC_0058.jpg

Fotos por Melissa Fuentes.

Los domingos siempre son días raros, dentro de la semana es el único día que resalta porque tiene una vibra extraña, el tiempo parece correr de manera diferente que a lo acostumbrado y, entre otras cosas, el cielo siempre está un poquito más gris de lo que normalmente está. De tal manera, que Mogwai tocara en un día tan místico como el domingo no fue coincidencia. La última vez que vinieron al país fue en noviembre del año pasado, como parte del Corona Capital, que hayan regresado tan pronto es algo bellísimo.

Mogwai fue extremadamente puntual en su presentación. Tomaron el escenario por ahí de las siete y veinte, poco tiempo después de que Sunset Images, la banda telonera, acabó de tocar. Los oriundos de Glasgow tomaron sus instrumentos y, sin darle rodeos al asunto, tras un breve saludo, comenzaron a tocar. La clásica “Haunted by a Freak” de Happy Songs for Happy People fue la rola con la que inauguraron la velada, seguida de “Crossing the Road Material” de su nuevo material Every Country’s Sun. Creo que todos los conciertos tienen un antes y un después. En el caso de Mogwai, el antes fue tranquilidad o una melancolía dominguera, las primeras canciones que tocaron eran más calmadas y silenciosas. “Take me Somewhere Nice” y “I’m Jim Morrison, I’m dead” (los grandes himnos de Mogwai, obviamente) también hicieron su aparición en la primera mitad del concierto. A estas alturas creo que los oídos del público todavía se encontraban sanos y salvos.

DSC_0004.jpg

Creo que el pandemonio se inauguró con “Rano Pano” de Hardcore Will Never Die, But You Will. Los primeros acordes de esta rola me hicieron saber que algo peligroso se estaba gestando. Temía por mis tímpanos, mi cordura y según yo el techo del Plaza se iba a caer porque los decibeles estaban demasiado altos. El “después” del concierto fue una locura total. Momentos de sosiego intercalados con las guitarras más ruidosas que he escuchado en mi vida. Mogwai vendió su alma al diablo a cambio de más volumen. “Killing all the Flies” y “Remurdered” nos demostraron que la banda no tienen ni un solo gramo de pena, pueden ser igual de silenciosos e introspectivos que ruidosos. Su música suena a una especie de violencia contenida, enojo, frustración, penas, hasta alegrías, todo esto reformulado y arrojado a nosotros en forma de canciones.

DSC_0006.jpg

Hay ciertas cosas que no se pueden poner en palabras, igual es por eso que Mogwai no usa vocales en la mayoría de sus canciones. Cuando tocaron “Mogwai Fear Satan”, la banda nos dejó bastante en claro que la música y la vida trascienden el lenguaje, que hay ciertas emociones o sentimientos que se viven tan intensamente que dejan una marca en nosotros para siempre. Hubo un momento donde la canción bajó su intensidad y se volvió algo súper tenue y frágil. El Plaza nunca había estado sumido en aquel ambiente tan reflexivo y silencioso, nadie hablaba, porque el hacerlo hubiera provocado una ruptura en aquello que la música había creado. Pero después de la calma: el ruido y la furia, jamás había visto a tanta gente temblar del susto al mismo tiempo, para después sonreír, y jamás había escuchado algo tan envolvente, que llegué a sentir hasta en la profundidad de mis órganos (además de que mi tímpano casi explota).

Después de salir un rato del escenario, regresaron para tocar “New Paths to Helicon, pt.1” y “We’re No Here”, sus dos últimas rolas. Al final, salieron del escenario sin decir una palabra, dejando atrás un mar de ruido. Mogwai nos dejó en claro su habilidad como poetas, de seguir transmitiendo pertinentemente emociones a través de un instrumento limitado. Todas sus canciones suenan infinitas, y no cabe duda de que lo sean. El concierto de ayer no fue solo eso, si no un instante fijo en el tiempo al cual podremos regresar cuando lo necesitemos. Un instante que se seguirá repitiendo incesantemente, siempre para bien, claro. Mogwai nunca morirá, pero tú sí.

DSC_0097.jpg

Encuentra a Santiago Gómez en Twitter como @x666nox

La primera edición del CONTRL FEST sorprende con un gran cartel

La primera edición del CONTRL FEST sorprende con un gran cartel

Future Islands: La capacidad de autoflagelarse frente a los demás

Future Islands: La capacidad de autoflagelarse frente a los demás