Los otros equipos que han cambiado de sede en el fútbol mexicano
Por Andrés Moreno
La mudanza de Monarcas de Morelia a la ciudad de Mazatlán es casi un hecho. Aunque, a la fecha, el club no ha confirmado su salida del Estado de Michoacán, el acuerdo parece ser inminente y en los próximos días se oficializaría la noticia. Sin embargo, el descontento de los fanáticos ‘canarios’ se ha hecho sentir, pues el fin de semana pasado, salieron a las calles de Morelia en protesta por la mudanza del equipo; a pesar, incluso, de la contingencia sanitaria.
Del acuerdo se sabe que se tratará de un cambio de sede, mas no de franquicia, lo que significa que el Grupo Salinas seguiría siendo el propietario del equipo. Aparentemente, la razón de la mudanza está en la falta de apoyo económico de parte del Gobierno de Michoacán y de las empresas locales, por lo que las directivas están buscando ese apoyo en el Estado de Sinaloa. Estos movimientos de sedes no son una novedad en el futbol mexicano, de hecho, son bastante frecuentes. A continuación, un resumen de los cambios de sede que han ocurrido en el rentado nacional.
Club Deportivo Marte:
El primero de los clubes en tener un cambio de sede fue, el ahora extinto, Club Deportivo Marte. Este equipo fue fundado en la Ciudad de México en el año 1928, sin embargo, se mudaron a la ciudad de Cuernavaca, Morelos, para la temporada 1952-53. Una vez allí, ganaron su primer y único campeonato profesional de liga, un año después de la mudanza; en la temporada siguiente descendieron y, en 1956, terminaron desapareciendo.
Hubo, a inicios de siglo, varios intentos de volver a consolidar el equipo. Sin embargo, nunca se pudo concretar su reaparición, por lo que el Marte permanece extinto.
Necaxa:
Los ‘electricistas’ son uno de los equipos que más mudanzas ha tenido en el fútbol mexicano. El equipo se fundó en 1923 en la Ciudad de México. Allí, jugó sus primeros años en el antiguo Parque Necaxa, demolido en 1943, tras la primera desaparición del equipo. Cuando reapareció el equipo, en 1950, tomaron el Estadio Ciudad de los Deportes, conocido ahora por el nombre de Estadio Azul, como escenario principal. Sin embargo, el Necaxa se mudaría, de nuevo, en 1955, esta vez al Estadio Olímpico Universitario, hasta la temporada 1965-66. En 1966, el equipo se mudó al Estadio Azteca, apenas era inaugurado el ‘Coloso de Santa Úrsula’.
El Necaxa se quedó en el Azteca hasta el año 2003. Allí, atravesó su época de transición donde se convirtió en el Atlético Español, tras la venta de la franquicia a un grupo de empresarios españoles, y volvió a ser el Necaxa luego de la compra por parte de Televisa, en 1982. Ese periodo le costó a los ‘electricistas’ el apoyo de su hinchada, que registraba muy poca asistencia al Estadio Azteca. Es por eso que, en busca de una nueva afición, el equipo se mudó al Estadio Victoria, de la ciudad de Aguascalientes; su escenario principal actualmente.
Cruz Azul:
La ‘máquina cementera’ inició su historia profesional jugando en el Estadio 10 de Diciembre, ubicado en la Ciudad Cooperativa Cruz Azul, en el Estado de Hidalgo. El equipo principal jugó allí desde 1964 hasta 1971, sin embargo, el inmueble aún es usado por las divisiones filiales del Cruz Azul y como estadio alternativo. Para la temporada 1971-72, se mudó al Estadio Azteca por primera vez, allí vivió una época muy fructífera, al obtener, en ese escenario, 4 campeonatos de Liga, 2 de Liga de Campeones de CONCACAF, 1 Copa de México y 1 Campeón de Campeones. En 1996, la ‘máquina’ dejó el Azteca para irse al Estadio Azul, antiguo estadio del Atlante, donde jugó hasta el 2018, cuando regresó al ‘Coloso de Santa Úrsula’ tras no haber renovado el contrato con los propietarios del Estadio Azul.
Atlante:
El Atlante es el equipo que más mudanzas ha tenido en el fútbol mexicano. De hecho, no contó con estadio propio hasta la inauguración del Azteca en 1966 (cuando formó una copropiedad con el América y el Necaxa), 48 años después de su fundación. En ese periodo, el equipo jugó desde las canchas públicas de la Condesa, en Ciudad de México, hasta en el Parque Necaxa o el Parque Asturias. Fue en 1946 que el Atlante se estableció en el Estadio Ciudad de los Deportes, hasta 1957, cuando se mudó al Estadio Olímpico Universitario. La estancia del Atlante en la actual casa de los Pumas duró hasta 1966, pues se mudarían al Estadio Azteca por primera vez, abandonando ese escenario en 1983. Para la temporada 1983-84, el Atlante regresó al Ciudad de los Deportes, renombrado en aquel entonces como Estadio Azulgrana. En 1989, el equipo volvió a mudarse, pero esta vez al Corregidora en Querétaro; allí duraron un año en el que descendieron a la segunda división, para después regresar al Azulgrana y retornar, igualmente, a la máxima categoría.
En 1996 el Atlante se fue, de nuevo, al Estadio Azteca, donde le ocurrió algo similar a lo del Necaxa. Tras ver un descenso en la asistencia al estadio, y la adquisición por parte del Grupo Pegaso, el equipo decidió regresar, otra vez, al ahora renombrado Estadio Azul, en el 2000. Allí duró hasta 2002, cuando se mudó al Estadio Neza 86, de Nezahualcoyotl y, de allí, nuevamente al Azteca en 2004. Su última mudanza se hizo en 2007, cuando, tras ver que la asistencia no mejoraba, decidió irse a Cancún, al Estadio Andrés Quintana Roo, su casa actual; allí levantó su último título de Liga y vio, nuevamente, el descenso.
Lo que tienen en común estos equipos, incluido Monarcas, es que todos cambiaron de sede en algún momento, sin cambiar necesariamente de franquicia. Hay otros casos en el fútbol mexicano en el que los equipos desaparecían por completo, como ocurrió con los Lobos BUAP que se fueron comprados por el Juárez F.C, y desaparecieron; o los Jaguares de Chiapas que, también, desaparecieron tras ser comprados por el Querétaro.