La película de la semana: 'Mujercitas'
En los 92 años que tienen de entregarse los Óscares de Hollywood, el famoso Premio de la Academia de cine de los Estados Unidos, resulta ilustrativo el hecho de que en todo ese tiempo solamente han sido nominadas en la categoría de mejor director 5 realizadoras.
Una de ellas, Greta Gerwig, quien fuera parte de las aspirantes al galardón en 2018 por su trabajo en Lady bird —las otras cuatro son Lina Wertmuller, Sofía Coppola, Jane Campion y Kathryn Bigelow, la única que lo ganó—, es el centro de una sonada polémica con el estreno de su nueva película Mujercitas.
Tercer largometraje de ficción de la también actriz, productora y guionista, la nueva adaptación del clásico literario de Louise May Alcott resulta una puesta al día de una historia varias veces contada por el mainstream norteamericano que le significó a la cinta 6 nominaciones al Óscar este año. A saber: mejor guión adaptado, mejor banda sonora, mejor actriz, mejor actriz de reparto, mejor película y mejor vestuario.
Entre los entendidos, y para los que no lo son tanto, pero que utilizan el sentido común como medida, parece complicado asimilar la ausencia de quien dirigió la cinta en la categoría de la especialidad cuando la misma está nominada a mejor película. La pregunta recurrente en las redes sociales que hablaban sobre el tema se podría resumir en un: "¿La película se dirigió sola?".
Más allá de la polémica, y del tema de la falta de equidad de oportunidades para las mujeres en un medio evidentemente machista, el trabajo de Gerwig en Mujercitas destaca por su mano firme en la conducción de un espléndido reparto (de ahí las merecidas nominaciones de Saoirse Ronan y Florence Pugh) y en un manejo inteligente de la línea de tiempo que se disloca constantemente para proponer una serie de elipsis muy interesantes.
A las virtudes formales de la propuesta de Gerwig merece la pena agregar una muy pertinente reflexión sobre el proceso creativo y la manera en la que las artistas se involucran en el mismo mas allá de lo que los convencionalismos sociales o de época esperan de ellas.
Hoy, con los Óscares entregados y sabiendo que la cinta sólo se llevó uno de la media docena a los que aspiraba (el de mejor diseño de vestuario para Jacqueline Durran), vale la pena visitar Mujercitas como una muestra más del talento de una de las voces femeninas mas interesantes de la escena norteamericana contemporánea, que seguramente, seguirá dando mucho de qué hablar.