Dark rap, chill step, emotividad narrativa, un despertar ideológico y más, en los discos de la semana
Y llegamos a un lunes más de música nueva, sonidos de diversos géneros que en Ibero 90.9 recomendamos para tu escucha. Checa el nuevo trabajo de una poetisa y bruja sonora norteamericana, un debut de pop-rap altamente esperado, sonidos desde el encierro directo de la mente de uno de los productores británicos más importantes y una revaloración ideológica a través de la música.
Escucha nuestra selección y añadelos a tu playlist. Estos son nuestros discos de la semana:
1. Black Encyclopedia of the Air - MOOR MOTHER
Este es el más reciente álbum de la artista y compositora estadounidense Camae Ayewa, mejor conocida como Moor Mother. La también poetisa y activista originaria de Filadelfia, Pensilvania, es la mitad del colectivo Black Quantum Futurism, junto con Rasheedah Phillips, y co-dirige el grupo Irreversible Entanglements. Activa desde 2012, Moor Mother se clasifica a sí misma como una productora de low-fi, dark rap, chill step, black girl blues, witch rap, coffee shop riot girl y black ghost songs, conceptos que definan claramente su enigmática y profunda propuesta.
Desde Fetish Bones, su debut en 2016, Ayewa ha mostrado una visión sonora única, y esta nueva placa es un ejemplo claro de la excelencia musical que es parte de su proceso creativo. El álbum es muy rítmico a momentos e incluso pegajoso en ciertos pasajes, pero con una sensación constante de estar continuamente al límite, al filo; muchas cosas suceden a lo largo y ancho del Black Encyclopedia of the Air, tanto sonora y narrativamente, con letras duras y humanistas, una característica constante de esta creativa a través de los años.
Este larga duración con 13 pistas, pero de tan solo 32 minutos de duración, incluye la participación de artistas como Pink Siifu, Brother May, Loji, Yatta, la compositora Elaine Mitchner y más, y fue grabado en casa de Ayewa en marzo de 2020, junto al artista y productor de paisajes sonoros Olof Melander.
2. MONTERO - LIL NAS X
Este es el álbum debut del rapero y compositor originario de Atlanta, Lil Nas X, titulado como su nombre real, Montero Lamar Hill. Después de generar polémica con el video para su sencillo “MONTERO (Call Me By Your Name)”, en el que el artista aparece como varios personajes de la Biblia, llega este trabajo muy esperado, un larga duración melódico y lleno de energía en el que esta estrella de pop-rap nos deja ver qué sucede en su cabeza.
El artista presenta su visión sonora a través de diferentes géneros, en el que podemos apreciar su bagaje musical, cómo fue crecer en una familia fracturada y todo lo que representó para él pasar la mayor parte de sus años en el clóset. Toda esta sustancia personal se refleja en un trabajo redondo en el que Nas X echa mano de sus productores de cabecera Take A Daytrip.
3. Silence - Alexis Taylor
Para aquellos que no estén al tanto, Alexis Taylor es uno de los productores musicales de la escuela DIY más importantes de los últimos años. El frontman de Hot Chip está de vuelta con su sexto álbum en solitario, tres años después del Beautiful Thing (Domino Recording Company). Silence fue creado en su totalidad durante el encierro, trabajado de manera remota con músicos como el bajista Sam Becker, el trompetista Kenichi Iwasa y la arpista Rachel Horton-Kitchlew, quienes generaron los fondos de cuerda y bajo. Iwasa compuso algunas de las partes de la trompeta sin haber escuchado las pistas existentes.
Este es un disco muy emotivo y denso, con melodías altamente conmovedoras que comunican sin tapujos el sentimiento de Taylor en estos tiempos extraños. Las narrativas son profundas, con temáticas como la mortalidad y las relaciones humanas, a través de su reconocible voz, aguda y delicada. La pérdida del oído también es tema: en 2019, el inglés desarrolló tinnitus, un sonido de timbre que pone en peligro la capacidad de experimentar el silencio.
4. Horizons East - THRICE
Horizons East es el onceavo álbum de los post-hardcoreros californianos Thrice, una placa en la que podemos escuchar que su frontman Dustin Kensrue se ha relajado narrativamente con el tema religioso/espiritual. Este cambio filosófico comenzó en 2016, y ahora ofrece a sus fans una suerte de “road map” para que aquellos de mente más cerrada puedan seguirlo en este despertar.
Este es definitivamente el álbum más experimental de la banda, un recorrido de 10 tracks que cambian de forma y discurso, con el dolor, la duda y la iluminación que se refleja a través de momentos de indie-punk, post-hardcore conmovedor y algo de R&B. Incluso sintetizadores y pianos son parte de la oferta sonora del disco.