La película de la semana: 'Noche de Fuego'
Foto cortesía: Sensacine
La noche de su premier mundial en el Festival de Cine de Cannes, Noche de fuego de Tatiana Huezo recibió una ovación de 10 minutos por parte del público asistente, al final de la proyección, el pasado 15 de julio de este año durante el concurso de la sección “Una cierta mirada”.
Más allá de los aplausos, que los detractores de los festivales minimizaban en unas redes sociales cada vez más polarizadas, mientras sus antagonistas naturales destacaban como memorables y justos, el estreno de la primera película de ficción de la reconocida documentalista le recordaba al respetable que el talento no sabe de géneros cinematográficos.
Tomando como punto de partida la novela Prayers for the stolen, de la escritora Jennifer Clement, Noche de fuego cuenta la historia de Ana, María y Paula, tres amigas que crecen juntas y juegan a leerse la mente en una comunidad minera de la sierra en mitad del bosque.
Como ha pasado en muchos pueblos parecidos los hombres se han ido al otro lado a trabajar, y las mujeres se encargan de la familia en medio de un vacío de autoridad, y una lucha constante entre el ejército y los cárteles locales. Un escenario en el que los pocos contrapesos para la resistencia se articulan en la escuela, la plaza pública o el salón de belleza. Desde ahí, algunos maestros tratan de promover la posibilidad de un cambio y las mujeres consuelan a las niñas que, al empezar a crecer, tendrán que cortarse el cabello en un intento para masculinizarse y ser blancos menos visibles.
Todos tienen miedo. De los soldados que llegan de vez en cuando y rocían con químicos los campos de amapola en los que trabaja buena parte de la comunidad. De los narcos que vienen por las niñas una vez que crecen y las desaparecen si sus madres no las consiguen esconder a tiempo. De que, como es bastante habitual, la señal del celular no sea buena y sea imposible comunicarse con sus esposos y todos los que ya se fueron. De la imposibilidad de pedir ayuda.
En el centro de ese caos, de este compendio de lo peor de lo que es capaz el ser humano, Tatiana Huezo tiene el talento y la sensibilidad de encontrar belleza y mostrarla a partir de la relación de tres niñas, que veremos convertirse en jóvenes, y que a través del cariño consiguen leerse la mente, comunicarse y hacerse las preguntas importantes sobre la vida.
Al final, conmovido por lo visto, concluyo que va a ser que los 10 minutos de aplausos a la película se quedan cortos y que, más que otra ovación, lo que merece Noche de fuego es que le dediquemos la atención que una obra de este calibre amerita. Que nos miremos en el espejo que nos está presentando como país de una vez por todas.
La película se estrenó esta semana y se puede ver en Cineteca Nacional, Cine Tonalá, Cinemanía y complejos de Cinepolis y Cinemex.
El More.
