'Blackbird': intenso retrato del abuso infantil
Sí. La memoria te puede marcar. También puede convertirse en tu peor traición cuando hay dolor de por medio.
Sentarse en una butaca de teatro para entrar en una historia como Blackbird, montaje basado en la obra original del escocés David Harrower y bajo la dirección en México de Katina Medina Mora, es un golpe en el estómago para todo aquel que ha atravesado por la complejidad de un vínculo que se convierte en un fantasma eterno aunque ya no exista. Por más que alguien pida: “No deberías pensar en eso ya…”. Porque la memoria repite sin cesar: “No necesito pensarlo. Está ahí”.
Los actores Alejandro Calva y Cassandra Ciangherotti interpretan a Ray y Uma respectivamente, los personajes que protagonizan la puesta en escena y nos confrontan con una realidad innegable en el país y el resto del mundo: el abuso infantil. Durante poco más de una hora se encargan de recrear un potente y terrible encuentro que expone de forma abierta una historia en la que “nadie consigue ser libre”.
La historia —de la que también existe la versión fílmica bajo el título de Una, bajo la dirección de Benedict Andrews—, está centrada en el lugar de trabajo de Ray (Alejandro Calva ), a quien Uma (Cassandra Ciangherotti) sorprende cuando lo visita. Los dos participan en una larga y densa confrontación que involucra la continua lucha de una mujer adulta para comprender sus emociones intensamente conflictivas a raíz del suceso que la une sin remedio desde su entrada a la adolescencia a Ray, quien sin conseguirlo, trata de olvidar lo sucedido más de 10 años atrás… Tatuando la vida de ambos sin remedio.
En palabras de Cassandra Ciangherotti, quien encarga a Uma:
“Creo que en los silencios que se guardan en las familias son muy comunes, yo creo que todos los que estamos aquí tenemos algún pedófilo en el árbol genealógico, es un tema que está vedado, que nadie quiere tocar. Pero cuando hablamos de abuso, lo que hacemos es alejarlas de la comprensión de lo que es el amor verdadero y luego formamos sociedades así, porque la gente que fue abusada está en todas partes. Por fortuna mucha gente logra encontrar las herramientas para salir, pero no todos cuentan con herramientas”.
Esta obra aborda la complejidad del tema más allá de provocar la satanización del tema, llevando más bien al espectador a la exploración de sus monstruos y miedos interiores.
La propia Cassandra Ciangherotti considera importante no satanizar: “Creo que es un tema importantísimo, hay muchas personas que pueden tener una tendencia, un deseo por niños, es un tema tabú, también debemos hablarlo, entenderlo”.
¿Cómo enfrentarlo?
La puesta en escena, con una traducción de Jerónimo Best y Camilla Brett, así como Adrián Martínez Frausto en la escenografía, se presentará del 9 de agosto al 29 de septiembre en Foro La Gruta del Centro Culltural Helénico, donde al concluir cada función encontrarás información proporcionada por la Fundación Origen quien brinda asesoría sicológica, emocional y legal, apoyo a personas que enfrentan o son cercanas a otras que han experimentado el abuso infantil. (Si quieres mayor información puedes comunicarte al 800 015 16 17).
Escucha a la directora de Blackbird
También te compartimos la conversación que tuvo Mario Campos en el programa #Radar909 la directora teatral y también cineasta Katina Medina Mora, quien señala que fue un reto conseguir un buen espacio para poder presentar Blackbird, una historia “muy compleja, con muchas capas”.
“Es una obra intensa pero del que tenemos que hablar. Me parece muy importante poner el tema (abuso infantil) en la mesa y esta obra lo hace”.
Katina Medina Mora
Escucha la entrevista a continuación:
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