Fotografías: @Marihana_Dizpen
El pasado 8 de febrero iniciaron los festejos conmemorativos por el año nuevo chino, el 4713 de su calendario, dedicado al Mono de Fuego, noveno de los doce animales del zodiaco chino. Como muchas otras culturas del mundo, el calendario chino se basa en las fases de la luna, siendo el primer día de luna nueva y quince días después luna llena, el cuál como un año solar se encuentra dividido en 12 meses. Sin embargo lo correcto es mencionar que es lunisolar ya que cada tres años se añade un año con un treceavo mes, con la finalidad de ajustarlo con el calendario solar, a este año se le conoce como embolismal.
Cuenta la legenda que fue la civilización Xia (2600 a.c). la que instituyó por primera vez este calendario al que a diferencia del zodiaco al que estamos acostumbrados, no se le divide en meses sino en años cada uno regido por 12 signos; la rata, el buey, el tigre, el conejo, el dragón, la serpiente, el caballo, la cabra, el mono, el gallo, el perro y el cerdo. Que a su vez están regidos por cinco elementos; metal, agua, madera, fuego y tierra, que van rotando cada doce años asignando un elemento a cada uno de los animales zodiacales, reiniciando el ciclo cada 60 años.
La también conocida Fiesta de primavera, es considerada la festividad más grande del mundo. Como es tradición se hizo presente en diversos puntos del primer cuadro de la Ciudad de México atrayendo a cientos de turistas, curiosos y a la comunidad asiática radicada en nuestra capital.
Diversas organizaciones e instituciones culturales, como el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), a través del Museo Nacional de las Culturas, en colaboración con la Embajada de la República Popular China y diversas asociaciones civiles, organizaron diversas actividades gratuitas el fin de semana pasado en el marco de este festejo.
Según dicta la tradición, al inicio de la primavera los Nian salen de su escondite, bajo el mar o en las montañas para atacar a la gente. De esta creencia nace la Danza del León complementado con el uso la pirotecnia, la cual ayuda a ahuyentar a las bestias y malos espíritus con el ruido.
Durante esta festividad se estila que la gente mayor regale sobres rojos con pequeñas cantidades de dinero a la los más jóvenes. como un augurio de buena fortuna.
Aunque oficialmente el 8 de febrero se conmemora el día de año nuevo, los festejos dieron inicio tres días antes, con demostraciones de Kung Fu y las Danzas del Dragón y el León, formando parte del ya tradicional desfile que partió desde la sede de la Lotería Nacional y que recorrió Avenida Paseo de la Reforma hasta alcanzar el Monumento a la Revolución, deleitando a los asistentes con los ágiles y multicolores movimientos de estos icónicos seres mitológicos de la cultura asiática que son utilizados para ahuyentar a los malos espíritus.
Por su parte el patio central del Museo Nacional de las Culturas fungió como sede para continuar con la agenda cultural del festejo. Con talleres de caligrafía, exhibiciones de artes marciales, conferencias y vídeos alusivos a la conmemoración que paraliza al gigante de Asia durante 15 días, hasta el llamado Festival de los Faroles que marca el final del los rituales anuales.
¡Feliz año nuevo a todos!
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