Disfruta de nuestras recomendaciones musicales en los Discos de la Semana

Disfruta de nuestras recomendaciones musicales en los Discos de la Semana

Estrenamos año, y con el nuevo ciclo llega música para arrancar enero con todo.

Además, esta entrega es especial, pues nuestras y nuestros expertos comparten su mejor disco.

Perverts - Ethel Cain
Tania Villacampa

Portada del disco Perverts de Ethel Cain.

Ser visitado por el demonio de tu parálisis de sueño, encontrarte cara a cara con tus pensamientos intrusivos, sentirte perseguido en un bosque lleno de neblina o transportarte a una escena de la película de Nosferatu son algunas de las situaciones a las que me lleva el escuchar el Perverts de Ethel Cain.

Su segundo álbum que en solo nueve canciones te lleva a un viaje de una hora y media, instrumentalizado por sonidos industriales, susurros y poemas escondidos con cada canción. Un disco mucho más ambiental y experimental comparado al anterior, Preacher’s Daughter, que estaba teñido de sonidos melancólicos y tristes para ilustrar los traumas generacionales, religiosos y la vida en una comunidad cerrada y mormona en donde se desarrollaron la abuela, madre y la propia Hayden. 

Full Moon - Moonchild Sannelly
Raquel Miserachi

Portada del disco Full Moon de Moonchild Sannelly

Usualmente rapea entre un inglés súper africanizado y su lengua materna, Xhosa.

Con la hipersexualización que caracteriza a la nueva generación de raperas negras y el volumen de su carne que rebota con orgullo descarado sobre los beats hondos y los breaks noventeros, en este tercer álbum hace un intento en el pop complaciente para masas.

Lo mejor del disco es lo que ya sabe hacer bien, contarte de su sexualidad flexible mientras te pega el sudor en un rave africanizado en “Sweet & Savage”, hablarte en una lengua tan familiar para ella como desconocida para ti que cuando te dice thanks agradeces de vuelta en “I Was The Biggest Curse” y romper con todos los ritmos posibles con su “Big Booty”. Sus intentos más comerciales no están mal, finalmente todo artista pop quiere intentar el balance entre autenticidad y capitalismo salvaje como el que lograron Bad Bunny o la Rosalía, pero sin duda se notan. Ya entenderás lo que digo cuando escuches la rola del tequila. 

I Can Change Your Mind - Maddie Jay
Erick Tello

Portada del disco I can change you de Maddie Jay.

“Fumar demasiada hierba cuando ya tenías demasiada ansiedad; acostarte encima de tus sábanas con una brisa ligera, teniendo un absoluto colapso nervioso”. Así es como Maddie Jay describe una mala relación con las sustancias y la química cerebral en su álbum debut.

Por más absurdo que suene, podrías darle la razón tras descubrir que se trata de pop y no punk de junkies, o escuchando el track #6. Lo más cliché de un artista emergente sería pensar que es un “viaje exploratorio a sus influencias musicales tratando de definir un estilo propio”, pero la canadiense ya está afianzada en una comunidad creativa de chicxs más cool que los personajes de Scott Pilgrim.

Su voz sedante se potencializa con una producción que masajea el cerebro y muy probablemente lo iluminaría en todos colores en un MRI, o como se llamen esos escaneos médicos.

La artista afirma en entrevistas que ciertos sonidos están inspirados por Aphex Twin y Radiohead, por si a alguien aún le interesa saber esa info para rastrearla en sus siguientes escuchas como los buenos incels que son. Si cualquier otrx artista consolidadx hubiera sacado este portento de álbum, toda clase de vitoreos estarían a lugar, si esto es solo el inicio, yo digo: Vivan Maddie Jay y las hojas de maple.

Spiral Your Way Out - Zzzahara
Valeria Estrada

Portada del disco Spiral Your Way Out de Zzzahara


En 2017, Lorde arruinó la vida de los románticos aferrados con una sola frase: "Cuando un amor ya no es para ti, el mundo entero lo sabe, menos tú". O quizá sí lo sabes, pero es más cómodo vivir en la negación que enfrentarte a la dolorosa e incómoda realidad de soltar.

Esto es lo que atravesaba zzzahara mientras componía Spiral Your Way Out, un disco sobre la lucha interna de saber que tienes que irte, pero tu amor propio aún no te lo permite. La oriunda de Los Ángeles escribió estas canciones en un momento de frustración, enojo y decepción de sí misma.

Desafortunadamente, estas emociones crudas quedan enterradas debajo de una voz dulce y guitarritas poperas tintineantes, que le quitan un poco de peso a lo que verdaderamente se siente tener el corazón destrozado. Hay discos que te cambian la vida, y este, no es uno de ellos. Pero sí es un buen acompañamiento para quienes están atravesando una situación similar y necesitan saber que, aunque a veces lo parezca, no están solos.

Hypnotize EP - NINA FAY
Regina Vázquez

Portada del disco Hypnotize de Nina Fay.

El Hypnotize EP de Nina Fay me llevó a dos lugares al mismo tiempo: a esos días en los que yo jugaba a ser sirena en la alberca allá por los 2000 y, al mismo tiempo, a un futuro utópico como los que soñábamos antes, lleno de blancos impecables, agua cristalina y tecnología que parecía magia.

Es un contraste que atrapa: nostalgia pura mezclada con una visión futurista. Nina construye estos mundos con una sensibilidad increíble; sus canciones conectan lo humano con lo tecnológico de una forma que se siente íntima y auténtica. Es como si te abriera una ventana a su propio universo, donde cada sonido te lleva a explorar rincones que no sabías que necesitabas visitar.

Who Let The Dogs Out - Lambrini Girls 
Leonardo Espíndola

Portada del disco Who let the dogs out.

El debut de las Lambrini Girls es la representación perfecta de lo que debería ser el punk en el 2025.

Aunque para este texto me gustaría cambiar la palabra punk por cunty (del término insultante cunt del inglés británico) citando la última canción del álbum. En sus propias palabras este término significa: saber decir que no, tener eyaculación en la playera y aprender a amarse unx mismx. Cada canción de Who Let The Dogs Out son un reflejo de la actitud cunty de unas británicas en sus veintes tardíos.

Son canciones que denuncian el acoso laboral (“Company Culture”), se quejan de los hombres que se creen mejores que lxs demás (”Big Dick Energy”) o que se burlan de lxs músicxs que rompen sus guitarras sabiendo que sus papás les pueden comprar todas las que quieran (”Filthy Rich Nepo Baby”).

La identidad cunty también se mantiene en el sonido a lo largo del disco, aunque es fácil pensar en otras bandas como Amyl & The Sniffers o IDLES. En especial disfruté “Special Different” por ser más dinámica y oscura que las demás. El álbum no tiene un sonido innovador pero sí es suficientemente cunty para ser el primer extracto del 2025.¡Que empiece la cunty era!

Llegó un cese al fuego en Medio Oriente en los últimos días de Biden

Llegó un cese al fuego en Medio Oriente en los últimos días de Biden