“Yo escuché los gritos de Paola Buenrostro. La vi morir”: Kenya Cuevas
El equipo del programa Contraparte platicó con la activista Kenya Cuevas, fundadora de la Casa de las Muñecas Tiresas A.C., sobre las experiencias que la llevaron a defender a las mujeres trans. La situación de abandono y violencia en la que ella creció ocasionó que Kenya se convirtiera en trabajadora sexual siendo menor de edad. Su condición empeoró cuando comenzó a tomar sustancias psicoactivas y a los 13 años, viviendo en situación de calle, es diagnosticada con VIH.
Su activismo comenzó en su estancia en la cárcel cuando vio la mortalidad de la población con VIH dentro del reclusorio. Kenya describe la constante llegada de personas infectadas que morían diariamente al no tener un tratamiento adecuado. Fue entonces cuando decidió junto con sus compañeros buscar la ayuda de la Clínica Condesa y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para visibilizar las condiciones en las que estas personas vivían.
Al salir de la cárcel en 2010, Kenya decide ser promotora de la prevención del VIH junto con algunas compañeras. Realizaban pruebas en la calle de algunas enfermedades de transmisión sexual y repartían condones a las trabajadoras sexuales por las noches. Sin embargo su vida cambió por completo cuando fue testigo del transfeminicidio de su compañera Paola Buenrostro.
Este doloroso suceso en su vida reafirmó su necesidad de luchar por los derechos de la comunidad trans de la mano de distintos colectivos y organizaciones sociales que se sumaron al caso de Paola, pero también le hizo ver la violencia sistemática y la invisibilización de su comunidad ante las autoridades. Durante todo este tiempo recibió amenazas de muerte y atentados contra su vida, por lo que ingresó al Mecanismo de Protección de Defensores de los Derechos Humanos y Periodistas. Tuvo que dejar su labor como trabajadora sexual y promotora de la prevención de VIH.
Con ayuda de la organización civil Equis: Justicia para las mujeres, Kenya trabajó para consolidar el 2 de abril de 2018 la Casa de las Muñecas Tiresias y la Casa Hogar “Paola Buenrostro”, asociaciones civiles que trabajan con poblaciones en situaciones vulnerables como lo son las trabajadoras sexuales, la población LGBTTTI +, personas en situación de calle y usuarios de drogas. Este espacio seguro se encuentra en Lázaro Cárdenas 59, Colonia La Casilda en la alcaldía Gustavo A. Madero, en la Ciudad de México.