Marcas, lujo y nuevas tendencias.Prácticamente desde que el cine es cine encontramos ejemplos en los que los personajes del celuloide pusieron de moda una forma de vestir. Además de influir de ese modo decisivo en lo que sucede en lo que viste el ciudadano de a pie, las historias de los grandes personajes de la alta costura son también material invaluable para escribir buenos guiones. Explosivo y delicado, enigmático y voraz, el talento de Yves Saint Laurent es un gran ejemplo de esa realeza que ha inspirado en el último lustro tres retratos fílmicos inolvidables. Lo mismo desde el documental (El amor Loco, Pierre Thoretton, 2010) que en clave de ficción (Yves Saint Laurent, Jalil Lespert, 2014) el genio de la moda nacido en Orán es de nuevo el entrañable protagonista fílmico del cual se encarga nuestra película de la semana: Saint Laurent (Bertrand Bonello, 2014) Desmarcándose de las dos cintas que la preceden por su tono y su irreverencia -el mismísimo Pierre Bergé intentó impedir que la película se estrenara en el festival de Cannes- la versión de Bonello se puede considerar como una biografía no autorizada que repara en algunos pasajes oscuros de la vida de Saint Laurent relacionados con adicciones e infidelidades recurrentes. Al final, y más allá de las discusiones estériles sobre cuál es la versión más certera y verídica de la historia, nos queda como conclusión que los genios y los personajes interesantes siempre darán para mucho más que una película. Para comprobarlo sólo hay que ir al cine a verlo. Buen fin de semana. @elmoremoreno