La película de la semana: 'Annette'
Al inicio de Annette, sexto largometraje del incombustible realizador francés Leos Carax, una leyenda advierte: “Durante esta actuación no se permite respirar”.
La promesa de la cinta, que inauguró hace unos meses el Festival de Cine de Cannes de este año, en el cual terminó ganando el premio a Mejor Dirección, cumple cabalmente lo que anticipa.
A una secuencia inicial, donde nos enteramos que lo que veremos es un musical y en la cual vemos al reparto completo acompañado de los compositores de la banda sonora (el grupo pop rock americano Sparks) y al propio director, le siguen una serie de viñetas y canciones que nos introducen en un mundo muy particular.
La propia puesta en escena nos avisa del inicio de la ficción y la representación en la que cabe todo:
Enamoramiento, éxito, pasión y bonanza seguidos de abuso, traición, envidia y violencia.
Detrás del ejercicio formal espectacular, en el que Carax nos recuerda que es un maestro moviendo la cámara y proponiendo elipsis de tiempo, descansa una profunda reflexión sobre la fama y sus mecanismos más obscuros; sobre las relaciones tóxicas, la paternidad y la venganza.
Una pareja de estrellas es devorada por su propia leyenda. Unos medios inclementes utilizan y desechan a sus creaciones favoritas al perder interés en ellas.
Una estrella que nace es explotada y expuesta sin el menor escrúpulo como fenómeno de feria. Un sentimiento va apoderándose de una hija abusada y acumulándose en un corazón herido.
Todo contado desde la apasionada, excesiva, reiterativa y surreal mirada de un director único que sigue entregando obras personales cada que estrena una película. Del trabajo de un autor que prefiere caminar al borde del riesgo del ridículo y la exageración, antes que lidiar con la tibieza o la indiferencia.
Annette ya se puede ver en Cineteca Nacional, Cine Tonalá, la Casa del Cine y complejos de Cinemex de todo el país y merece mucho la pena.
El More.