Los Gaiteros de San Jacinto: fusión en pro del fandango
Hablar de Los Gaiteros de San Jacinto, es abordar un buen pedazo de historia en la música colombiana. Esa que tiene que ver específicamente con la ancestralidad de sonidos de viento; flautas y gaitas, además de las hibridaciones posteriores entre el sonido del tambor africano y las inclusiones del acordeón alemán tropicalizado por los lugareños de San Jacinto.
Lo que han instaurado Los Gaiteros (de forma no intencional) a lo largo de los últimos 60 años, han sido formas, códigos de sonidos que han penetrado dulcemente en la memoria, debido a su composición, pero también por sus valiosas narraciones; sencillas, nobles. Mismas que pueden ser fijadas como un atributo invaluable.
Estos personajes encarnan el más crudo espíritu parrandero; camaradería gestada bajo una noche de tragos y baile. Sus rolas, por ende, engendran un espíritu tirado, el cual no hace otra cosa sino incitar a moverse. La parranda es colgarse del mínimo pretexto bajo el cual aflora un fandango. Fluyen aparentemente sin algún tipo de formalismo, da igual que toque hoy su compa Carmelo Torres o algún otro músico allegado, la intención es tocar.
La carrera de Los Gaiteros de San Jacinto ha mutado, es lo que suele ocurrir con bandas tan longevas: Egipto 80, Skatalites o los mismos Gaiteros de San Jacinto, quienes han rolado alineación en diversas ocasiones. Su fundador “Toño” Fernández, salió a principios de la década de los 80, y aunque han entrado y salido músicos, no ha mermado el sonido que poseen como grupo. Los artistas adheridos confieren la identidad de la banda gracias a su cercanía familiar.
Aunque hoy día se muestra un aparente desapego entre un gran número de nuevos productores con la música tradicional colombiana, no lo es para muchos otros. En 2014 Llorona Records, bajo iniciativa de Diego Jiménez, se empeñó en canalizar el sonido tradicional de los Gaiteros hacia nuevos horizontes, unos menos explorados.
Adrian Sherwood se sumó al proyecto y metió mano para generar Dub de Gaita (Kaliphonic Records, 2015) un delicioso experimento que engendró, como dice Sherwood, “sonidos estimulantes, y a la vez respetuosos con el legado de la agrupación”. En realidad el resultado es un trabajo excitante debido a la naturaleza de los ecos y las reverberaciones, fusionado a los pegajosos sonidos del acordeón, gaitas y tamboras.
El próximo sábado, 3 de marzo, Los Gaiteros se presentarán bajo el acto “Dub de Gaita”, dentro de las festividades de NRMAL 2018. El objetivo es llevar los sentidos a un estado de relajación continua, emanado de una raíz prístina como lo es la música de gaita. Un apéndice sonoro lleno de historia, tradición y vida, proveniente de una de las bandas emblemáticas del norte colombiano.
Encuentra a David Ovando en Twitter @Ovandoous.
