La psicodelia de Pond
En su regreso al festival capitalino, los australianos surgidos de Tame Impala demostraron que son más que eso. Distorsiones agresivas, ecos atmosféricos y sintetizadores que derriten cerebros, fueron la guía de su última presentación antes de regresar a su país natal.
La mezcla de sonidos electrónicos y acústicos acompañaron el performance de Nick Allbrook a lo largo de 40 minutos. Con canciones como "Sweep Me Off My Feet", "Giant Tortoise" y "Sixteen Days", Pond hizo un recorrido sonoro de los últimos ocho años de su carrera, mostrando la evolución que han tenido en su sonido.
El ruido se convirtió en la base atmosférica que cubrió al Doritos Bunker, dejando a sus asistentes con ganas de otro regreso al Corona Capital.