King Tuff y su búsqueda por 'El Otro'
King Tuff es el alter ego del músico Kyle Thomas, multi instrumentista originario de Vermont, un pequeño estado al noreste de los Estados Unidos ―perteneciente a la zona conocida como New England―; en 2018 regresa luego de una ausencia de cuatro años para presentar The Other, su cuarto álbum oficial y el de manufactura más diversa.
Kyle Thomas había trabajado con el productor Bobby Harlow, quien explotó los dotes guitarreros/rockeros del artista en sus dos álbumes previos: King Tuff (2012) y Black Moon Spell (2014), en los cuales Thomas/Tuff mostró su instinto para crear riffs de guitarra sencillos y poderosos. Para The Other, el propio Thomas asumió el trabajo detrás de la consola, y esos sonidos básicos primitivos se han refinado: el espíritu que impregna a las composiciones actuales posee un halo diferente al de las anteriores; definitivamente rítmicas y movidas, pero más armónicas y complejas, con elementos de folk, blues, psicodelia, garage, funk, invasión inglesa, glam, indie y soul.
Basta escuchar el tema homónimo abridor, lento y extenso, para entender que sus intereses se han expandido.
"The Other" habla de la búsqueda existencial de un remedio para el alma, y entendemos que "El Otro" es alguien que no se encuentra en este plano terrenal: aquél cuya creencia es negada por los científicos, y a quien se llega por caminos libres del tráfico mundano. Basta ver la imagen de la portada ―una luz intensa sobre la cabeza de Thomas―, para entender que se trata de la misma aura que corona a esta obra, en un giro similar al que tuvo Black Rebel Motorcycle Club cuando en Howl dejaron atrás los guitarrazos porque aparentemente habían encontrado a Jesús.
Más allá del contenido literario, en la cuestión musical The Other también nos presenta a "Otro" King Tuff, en una encarnación más madura, que nos engancha con el ambiente creado por las trompetas de "Raindrop Blue", el sabor glam de "Thru the Cracks", o el folk blusero de "Ultraviolet", con un dejo al sonido guitarrero de Dire Straits, adornado por coros beatlescos.
Como ya parece obligatorio en las producciones actuales, The Other cuenta con colaboraciones artísticas importantes: para empezar, el californiano Ty Segall ―otro multi instrumentista de cuya banda ha sido miembro Thomas―, contribuye con la batería en algunas canciones; no es sorpresa que los estilos de ambos sean compatibles. La que sí es sorpresa es la participación de Jenny Lewis, ex-mujer al frente de Rilo Kiley, que hace unos coros muy sutiles en la arriba mencionada "Thru the Cracks". De igual manera destaca el saxofón de Mikal Cronin, también amigo y miembro ocasional de la banda de Segall.
Mención especial hay que hacer al sello encargado de este lanzamiento: Sub Pop. La prestigiada disquera de Seattle, que creció gracias a bandas como Nirvana, Mudhoney o Soundgarden, y que ha dado un giro en el siglo XXI con notables actos independientes como The Postal Service, Foals o Father John Misty. Cierto, es desconcertante pensar que Kyle Thomas tuvo que atravesar los Estados Unidos de costa a costa para conseguir disquera; aunque, por otro lado, Vermont no se distingue por tener grupos de rock sobresalientes, si acaso la única banda conocida de ese estado es Phish.
King Tuff aún tiene un largo camino por delante: si lo recorre con su propia guitarra o con la ayuda de sus amigos, aún está por verse. Pero por ahora, nos presenta en The Other un trabajo sobresaliente que ha logrado ampliar las bifurcaciones de su carrera.
Encuentra a Juanito el del demo en Twitter @eldeldemo.