Gobernar fuera del clóset
La orientación sexual no debería ser un tema a discutir en ninguna profesión; a pesar de esto, a lo largo de la historia, muchos políticos y líderes han tenido que permanecer en el clóset para aspirar a una carrera exitosa.
Hay cierta expectativa para este tipo de jefes o autoridades de mantener la imagen de la vida perfecta y la familia ideal; paquete que incluye una bella esposa de la mano e incluso un par de hijos con un historial impecable. El perfil que se proyecta fuera de estos hogares es en realidad una fantasía, creada por asesores de campaña y expertos en publicidad para hacer creer al votante que su vida es completamente congruente con los valores del país o de algún partido, cuando en realidad, la vida privada de un político puede mostrarnos un panorama completamente diferente.
La sociedad en la que vivimos antepone el carisma o la simpatía con algún representante a sus habilidades para dirigir y crear un mejor gobierno. Todos nos hemos referido a algún político con las frases “no me cae bien” o “no me da buena vibra”; juzgamos antes de conocer a fondo su campaña.
Ser abiertamente gay, lesbiana o trans no sólo implica perder un empleo; para muchas personas, esta realidad puede costarles la vida. Si de por sí cualquier persona queer que decida admitir públicamente su orientación sexual es difícil, entrar al juego político puede resultar mucho más complicado.
A pesar de ello, hay que reconocer el progreso y a aquellos personajes valientes que han participado en el gobierno admitiendo abiertamente su orientación sexual.
En nuestro país, por ejemplo, Patria Jiménez en 1997 se convirtió en la primera Diputada Federal plurinominal públicamente lesbiana, en la historia de Latinoamérica. Durante su mandato, promovió la despenalización de la homosexualidad como agravante en el Código Penal, mientras que el diputado local David Sánchez Camacho, propuso penalizar la discriminación a personas homosexuales y organizó en 1998 el Primer Foro de Diversidad Sexual y Derechos Humanos en el Distrito Federal. Por último, Benjamín Medrano Quezada, fue elegido presidente municipal de Fresnillo, Zacatecas en 2013, convirtiéndolo en el primer ciudadano abiertamente homosexual en ser elegido presidente municipal por voto popular.
Otro ejemplo, ahora en el plano internacional, es el de Luxemburgo, un pequeño país de Europa que se puede recorrer en menos de 45 minutos en coche, conocido como el paraíso fiscal de varios empresarios. Actualmente, su gobierno es encabezado por los únicos funcionarios abiertamente gay: el Primer Ministro Xavier Bettel y el viceministro, Étienne Schneider.
Desde principios de 2015, el matrimonio igualitario es una realidad dentro de este país y Xavier Bettel fue de los primeros en aprovechar esta reforma de ley para casarse con Gauthier Christian Destenay.
En el 2014, Bettel enfrentó actos de violencia por su orientación sexual, cuando un parlamentario griego se dirigió por Twitter a Bettel y su esposo como "pareja de maricones" (faggot partners), a lo que el político de Luxemburgo contestó: "Hola, escuché que querías decirme algo, pero no hablo griego. Lo siento".
Luxemburgo es el segundo país más rico del mundo; en 2014 se reportó un PIB per cápita anual de alrededor de 92,049 dólares. Tiene uno de los mejores sistemas de salud y un muy bajo índice criminal; sólo existen dos prisiones en todo su territorio. Bajo el mandato de Bettel se reconoce una mejoría dentro del sistema de pensiones y educación, se ha transformado en gran aliado de la Unión Europea, fomentando la cooperación y participación después del Brexit de Inglaterra, asumiendo un mayor rol y una mayor cuota financiera para esta asociación. Su sexualidad nunca fue un secreto o un problema que le haya impedido gobernar.
“Yo no era el ‘candidato gay’, la gente no votó por mí por ser gay o por ser hetero ".
Xavier Bettel, Primer Ministro de Luxemburgo
Otro país que sirve como ejemplo es Serbia, que no sólo debería ser reconocido como el mayor exportador de frambuesa o uno de los países con la mejor vida nocturna en el mundo, sino que también su Primer Ministro, Ana Brnabić, actualmente es la única mandataria en el mundo públicamente lesbiana. Asumió el rol este 2017 sin pertenecer a ningún partido político y se convirtió en la primera mujer en liderar el país.
Brnabić ha mantenido la estabilidad dentro del país al modificar el interior para eventualmente aspirar a convertirse en miembro de la Unión Europea. No ha posicionado una agenda de género o de matrimonio igualitario en el país, asegurando que no es una prioridad. Cree que la tolerancia llegará a Serbia cuando se logre combatir el desempleo y cuando mejoren los salarios y el sector salud.
"Serbia está cambiando rápidamente, yo soy parte de ese cambio, no quiero que me etiqueten como 'la lesbiana de Serbia'. El mensaje que debemos enviar es sobre competencia, profesionalismo y confiabilidad ".
Ana Brnabić, Primer Ministro de Serbia
Conviene preguntarse, ¿cuántas compañías o ambientes laborales son realmente incluyentes? ¿Y qué tan incluyentes somos en realidad? Estos personajes demuestran que la orientación sexual no implica un obstáculo en su carrera.
Gracias a personas como Bettel o Brnabić, se abre la discusión de que las políticas son mucho más importantes que la sexualidad, y los resultados no están ligados a la vida privada de los líderes nacionales. Sin embargo, las cifras siguen siendo muy pequeñas en un momento donde la visibilidad de otras manifestaciones afectivas es vital.