[EXTRACTO]: "Backwater" de Kllo, un espacio para la reflexión
"Es la primera vez que ya no nos sentimos como niños. Fuimos capaces de sumergirnos profundamente y sacar mucho más de nosotros en la música." - Chloe Kaul
Kllo es un dueto de pop electrónico conformado por Chloe Kaul y Simon Lam, primos originarios de Melbourne, Australia. Su primer EP, Cusp (Ghostly International, 2014) sorprendió por su propuesta visionaria, una fusión de elementos Rhythm & Blues, garage británico y 2-step, impregnada de un mood sensible y sincero. El lanzamiento de su segundo trabajo, Well Worn (Ghostly International, 2016), confirmó lo que ya se sabía: Kllo es una propuesta fresca y necesaria en la escena electrónica.
Después de generar millones de streams con sus dos primeros EPs, de presentarse en diversos festivales en Australia y Europa (como el Live at Leeds o el Let Them Eat Cake), y dejarse consentir por medios importantes, Kllo presenta su nueva placa, Backwater (Ghostly International, 2017). Este es un trabajo con el que el dúo deja de ser un Artist To Watch para convertirse en una propuesta fuerte y consolidada; una refinada oferta musical que mezcla exitosamente una trágica melancolía lírica con electrónica modernista. Este álbum refiere rápidamente a artistas como The XX, Moderat, James Blake o Lamb, pero eso no lo hace menos valioso, ya que genera una disfrutable sensación al escuchar algo que parece familiar pero que es nuevo, un sentimiento de haber visitado ya este espacio sonoro, pero tal vez en otra vida.
Backwater está compuesto por 12 temas, canciones que fueron escritas on the road y trabajadas a detalle en la cabaña-estudio de Lam en Melbourne. Este larga duración les ha permitido más espacio para la narrativa y el flujo de la rítmica con lo emotivo, de la matemática conjunción de la programación con el etéreo de los sentimientos. La suave y cadenciosa voz de Kaul vibra con seguridad y disfrute. En su tesitura se percibe claramente la madurez que ha alcanzado y envuelve al escucha en un halo de intimidad. La producción de Lam es como una corriente metálica subterránea que está ahí al acecho constante, para entonces surgir con fuerza y personalidad a través de diversos crescendos.
El título del álbum significa remanso, que refiere a la parte de un río que no es tocado por la corriente, en donde el agua se estanca y se enturbia. Pero el remanso también colecta elementos para generar laberintos de diversas formas y canales con ecosistemas propios. Estas backwaters permiten un momento de reflexión, un lugar alejado del flujo constante en el que se puede madurar. La selección de temas representan la celebración de los cambios efímeros, las caídas, disoluciones y estar lejos de casa mientras se añora lo familiar.
La placa abre con “Downfall”, tema con tintes existencialistas que habla sobre la inminente caída que está por venir, como ésta define a cada uno y el dejar el pasado atrás. Inmediatamente después, la instrumental “Still Motion” se define por sí misma. El primer sencillo del disco es “Dissolve”, el tema más upbeat del álbum, que canta sobre tomar la decisión de disolver una relación:
“Been my desire, my pleasure, my pain / Never could see this coming
Called it forever, we're caught in the game / Or maybe we're both to blame
Putting this under pressure / You wanna ride but keep on rocking the boat
Soon it will tip us over / And there won’t be another”
“Virtue” es un tema muy completo, con un arranque lento, murmullos, tartamudeos y síncopa, que desemboca en un ambiente de club electro. El coro pregunta "Can I count on you?" mientras el drama aumenta sin parar, para llegar a un cierre eufórico y conmovedor. Los sonidos de voces digitales como elementos decorativos traen a la mente a artistas como Hot Chip o Moderat.
“Virtue es sobre no saber lo que tienes hasta que se va, ya sea un parte tuya o de alguien más. Es el momento presente en el que finalmente te das cuenta de ello.”
- Chloe Kaul
En “Last Yearn”, Kaul exige una conclusión en la relación, y se pregunta cuál es el camino a seguir. Los sintetizadores y arpegios generan una dinámica de tensión que se libera hacia el final del tema con un bello crescendo, cuando la letra comparte lo que es anhelar por alguien. El track del título, “Backwater”, repite como mantra una sola frase: “Don't walk away / everything's all for you”. Corto y al punto, este tema es una transición, un sentimiento de encontrarse a la deriva pero en este remanso, a la espera de algo que pronto sucederá, pero libres de la fuerza de la corriente que restringe ciertos movimientos.
La balada del tercer trabajo de estudio de Kllo es “Nylon”, canción nostálgica que habla sobre madurar, sobre la influencia de otros y su embrujo sobre uno mismo.
“I don't wanna die young / die young
Someone to rely on / side on
Don't want no one to cry on / stretched as thin as nylon
I'm forcing a smile / treated me like a child
Breaking in like a tidal”
“Making Distractions” canta sobre la inacción consecuencia de la indecisión frente a las personas o al ser querido. Kaul pide no ir a dormir hasta estar satisfecha, lo que deja ver el hambre por la vida y el amor, la creencia firme que tiene en las relaciones de pareja y la importancia de enfrentar las situaciones. Las cajas de ritmos de Lam ofrecen un delicado downtempo con atmósferas llenas de armonía.
“It was not my intention but
I'm wanting it all back / I'm wanting it all
Had I lost my reflection when
I let it all go, it was not my intention / what was my intention?”
Estas doce composiciones ofrecen melodías dulces y cantos con suspiros sobre ritmos salteados, rotos a momentos. Esta es música con alma que de pronto se convierte en electro-pop. Su estilo británico les provee de canciones especialmente seductoras y muy melódicas que, con ciertos elementos experimentales, dejan ver sus antecedentes underground. Kllo ha creado un trabajo atemporal y elaborado, pero actual. El río podrá correr sin parar jamás, pero uno cuenta con el remanso para respirar, decidir, elegir y entonces actuar acorde con las circunstancias de nuestras vidas.