La explosión de sonidos delirantes con Sotomayor
El pasado sábado 15 de febrero en un día muy soleado, los asistentes al Carnaval Bahidorá 2020 estaban listos para comenzar el segundo día de actividades, mientras algunos otros llegaban a las inmediaciones de Las Estacas, en Morelos, lugar perfecto para esta comunión en la que la curaduría musical no tardó en apoderarse de los asistentes.
Sonorama, escenario principal del Carnaval, hacía notar instrumentos que previamente fueron calibrados para poder ser escuchados en sus altos niveles. El acto encargado de dar inicio al segundo día fue SOTOMAYOR, banda mexicana conformada por los hermanos Paulina y Raúl Sotomayor.
Personas bajo el rayo del sol, con una sonrisa gustosa esperaban a que el reloj marcara las 12:30 horas. ¿Listos? Arrancamos. El primer acorde puso la piel chinita a los escuchas, con un sonido envolvente que atrapa a sus espectadores, los pone a bailar y a cantar al unísono los coros de sus melodías.
Ya con toda la barbarie arriba del escenario, los hermanos presentaron rolas de su última producción, Orígenes (Wonderwheel Recordings, 2020), que retumbó en las bocinas del escenario principal y, tal como encantadores de serpientes, los hermanos sacaron a relucir los mejores pasos de baile de los asistentes que gustosos movían el cuerpo.
Conforme avanzaba el set las cosas se pusieron más calientes, con las líneas melódicas, los acordes y la voz de Paulina que se apoderaban del escenario, tanto que en un momento la banda bajó el nivel del sonido para que los escuchas pudieran cantar al unísono las rolas de sus poderosas canciones. Así fue su presentación, una impresionante muestra que nos deja ver que para crear música a altos niveles sólo se necesita ser un verdadero loco y apasionado.