Por Mariana Tames
El reino del hip hop lleva ya largo tiempo con trono pero sin reina. El pueblo nota su ausencia, se junta en las plazas y protesta sólo una cosa: el comeback de su majestad Missy Elliott. Piden a gritos que la rapera originaria de Virginia regrese a los escenarios para “shakequear su Pom Pom” y disfrutar de su estilo funky fresh.
El suspenso llegó a su fin, cuando la reina salió de su balcón para decir a sus súbditos: "I don't just throw out microwave records."
El hip hop se siente vacío sin ella, es como ver a Han Solo sin Chubaca, a Marilyn Monroe sin Kennedy, a Salt sin Pepa. Nacieron para estar juntos. Una combinación que siempre trae resultados óptimos y rimas exquisitas, no por nada el álbum Cookbook (The Goldmind Inc./Atlantic Records, 2005), alcanzó el puesto número uno en el U.S. Billaboard Top Rap Albums.
Missy Elliott es la indicada para enseñarle al chico blanco de cara bonita, que el hip hop es cosa seria. Se necesita swag, un don para hacer buenas rimas que manejen un calibre similar a este: “I shake it like jello, make the boys say hello”, y signos de autenticidad.
Misdemeanor (apodo con el que también es conocida) tiene el combo completo, ella misma afirma, al principio de la canción “We Run This”, lo siguiente: “My style can't be duplicated or recycled.” Al tratarse de artistas como ella, nunca está de más darle un breve vistazo a los momentos más característicos de su carrera.
Missy tiene como amante a la marca Adidas, como mejor amiga sus joyas y de hermano pequeño a sus tenis. Estos son los tres amores incondicionales que a lo largo de su carrera ha demostrado tener.
Pero ¿qué pasaría, si alguien quisiera meterse con su mejor amiga? La respuesta se dio a conocer cuando en el 2003, Punk'd, el show de MTV que entonces era conducido por Ashton Kutcher, decidió jugarle una broma que consistía en hacerle creer que sus joyas habían desaparecido de la tienda a la que usualmente las mandaba a arreglar. La reacción de la cantante fue poco predecible; se subió al mostrador y amenazó a cada empleado de la tienda con que si sus joyas desaparecían, las cosas se iban a poner serias. Sólo fue una broma, pero la moraleja de la historia quedó clara: no meterse con las joyas de Missy Elliot.
La música de la rapera ha protagonizado varios soundtracks de películas, su lista incluye Step up 2 (2006), donde los sencillos “Ching-A-Ling” y “Shake Your Pom Pom”, se pueden apreciar. Éstas son melodías cargadas de un estilo callejero que incitan a un dance-off. Otra película que gozó de su swag es El Espantatiburones (2004), donde la cantante fue caricaturizada junto a Christina Aguilera para interpretar el sencillo “Car Wash”.
Su vocación, si el caso lo amerita, puede variar. Sin problemas ha podido llevar a cabo el papel de doctor, ya que constantemente inyecta nuevos pasos de baile a la pista. Junto a Ciara, su enfermera consentida, ha implementado el “1, 2 Step”.
Su abstinencia no incluye los escenarios. Su última aparición fue en 2013 en el L.A. K-CON, una convención anual de k-pop, donde presentó su sencillo “Niliria” en colaboración con G-Dragon.
Actualmente Missy se encuentra detrás del telón para trabajar tiempo completo en su próximo álbum titulado Block Party. Lo único que ella promete es la existencia de un lanzamiento pero hasta ahora no ha revelado la fecha: “It's coming! I just ain't telling nobody when!"
