Claud, pop queer y amigable para las nuevas generaciones
El artista de 21 años es el primer talento que firma con el nuevo sello de Phoebe Bridgers, y se inspiró para su álbum debut en los legendarios estudios Electric Lady
Claud es un talento emergente de 21 años que se presenta con un pop queer, accesible, cálido y amigable, con el que no pretende nada más que mostrar su propia identidad. Es el primer talento que emerge del sello Saddest Factory Records, la nueva apuesta de la cantante Phoebe Bridgers.
Cuando un artista surge con un monónimo o nombre único ya sea un nombre artístico o un alter ego, suele ser señal de que se dirige al estrellato. Así se presenta Claud, aunque contrario al ideario de que esta personalidad lo pone más allá de lo terrenal, para él supone todo lo contrario y se presenta con su nombre de pila, destaca la periodista Mia Hughes, en la entrevista que le hizo a este nuevo talento para la sección Breakout del semanario británico NME.
A inicios de año, Claud Mintz se encontraba en sesiones de co-escritura para su primer LP en Los Angeles, California. Aunque entonces aún no contaba con una disquera, ya había logrado una cifra envidiable de streams con sus melancólicos sencillos “Wish You Were Gay” y “Miss You”, aunque esta fue una tarea agotadora.
“En verdad me cansó mucho y me entristeció, hacer esas sesiones en Los Angeles; había sido suficiente”, dijo el artista nacido en Chicago y radicado en Nueva York, en entrevista exclusiva con NME.
Tras este episodio Mintz decidió mejor viajar y, a la llegada de la pandemia de COVID-19 y el confinamiento, regresó a la casa de su padre en Chicago con nuevas fuentes de inspiración.
“Tomé todas las canciones que había escrito en los últimos dos años y comencé revisarlas y afinarlas. Cuando sentí que había logrado concretar de alrededor de 50 canciones a unas 15, renté un auto y manejé 13 horas a Nueva York”, narró a la publicación musical.
Terminó su disco en los legendarios Electric Lady Studios.
En noviembre se anunció que Claud sería el primer talento en firmar con la nueva disquera a cargo de Phoebe Bridgers, Saddest Factory Records, bajó la cual lanzó el melancólico pero divertido tema “Gold”.
“Phoebe me había estado intentando firmar por un tiempo —alrededor de un año— y me llevó un rato tomar una decisión porque siempre había sido artista independiente. Pero firmar con Phoebe fue lo más emocionante para mi, por que mi A&R es una mujer queer que también es artista; literalmente no podría ser mejor que esto”, agrega.
Considera que la gente que escucha música estos días tiene un espectro mucho más amplio y quieren escuchar cosas diferentes, al ser cuestionado sobre la influencia de su música en la Generación Z o Centennial a la que pertenece. “No están escuchando a un grupo de artistas que hacen el mismo tipo de música”.
Claud busca proveer un espacio seguro y ser una influencia positiva para la gente joven queer, al ser un artista que les representa, y espera que se sientan cómodos con sus identidades.
“Ese es mi sueño. Amo ver a gente queer conociéndose a través de mi música y asistiendo a mis shows. Para mí es un sueño hecho realidad. La gente queer sigue siendo excluida”.
Y añade que tan es así que por algo existe el estereotipo de que la gente gay no sale con gente de su misma ciudad. “Es porque nos encontramos a través del internet. Naturalmente estamos más solos y amo unir a la gente”, concluyó.