El futuro es femenino y Billie Eilish lo sabe: escucha “my future”
El 2020 pintaba para ser el año de Billie Eilish, luego de dominar el 2019 con su debut When We All Fall Asleep, Where Do We Go?, que la colocó como el fenómeno mediático/musical de los últimos años. La compositora y vocalista de apenas 18, inició el veinte-veinte con un triunfo avasallador y nada inesperado en la entrega de los Grammy, echándose al bolsillo las cuatro categoría principales, incluyendo Mejor Álbum, Mejor Canción y Mejor Grabación del año. Luego, en febrero, cuando la pandemia aún parecía una amenaza distante y sigilosa, incursionó en el terreno del super-espía británico 007 para tomar la antorcha musical de una de las franquicias más exitosas y longevas del cine, interpretando el célebre e imprescindible “tema Bond” para la cinta número 25 de la saga, No Time To Die. La canción homónima de Eilish se alejó de la suntuosidad de sus anteriores emisarios, Adele y Sam Smith, e hizo gala de su estilo estoico y meditativo, a la ASMR, con un tema que rompió el canon Bond, sin perder el garbo característico de la serie.
Pero luego de que todo el aparato de entretenimiento (cine, música y cultura) echara por la borda sus agendas frente a la crisis sanitaria por COVID, Eilish tuvo que cancelar su ya iniciada gira mundial y, junto con su hermano y productor FINNEAS, puso en pausa sus planes de continuar conquistando el mundo.
Ahora, luego de un anuncio hace un par de días en su Instagram sobre el arribo de una nueva canción, Billie ha compartido finalmente su tema inédito “my future” (así, en minúsculas como acostumbra), donde sorprendentemente abandona su melancólico y, a ratos, siniestro carácter, en favor de una personalidad más luminosa y plena.
La misma Eilish que alguna vez cantó «Hoy estoy pensando en las cosas que son mortíferas, la forma en la que acabaré contigo, como que quiero ahogarme, como que quiero acabar conmigo» en “Bury A Friend” ahora canta «Estoy enamorada de mi futuro y no puedo esperar para CONOCERLA», rematando así de forma personal con la consigna más poderosa que ha adornado las pancartas del feminismo por años: Future Is Female!
Luego de referirse al “futuro” como mujer (sea hablando de ella misma, sea hablando de alguna deidad superior), procede a cantar con cierta sensualidad, como lo haría si estuviese frente a un posible interés romántico, pero ahora más bien, como en una suerte de introspección revelatoria, se dirige a sí misma: “Se supone que debería estar triste sin alguien, pero, ¿acaso yo no soy alguien?”.
La pieza progresa de una balada a una especie de dreampop con toques R&B y una guitarra y percusiones que añaden el toque justo de funk para hacer de “my future” un tema uplifting, elevado, optimista, alejado de sus anteriores hits de sintetizadores agresivos y vocales ásperas. Y hablando de vocales, en “my future”, Elish se luce con la misma dulzura y delicadeza con la que interpretó “Yesterday” de Lennon a inicios de este año durante la ceremonia del Oscar.
El video de “my future” es igual de gentil y benévolo, abandonando los ojos demoniacos, las lágrimas negras, las colillas de cigarro en la cara y las tarántulas saliendo de la boca en favor de una animación con cierto toque anime e infantilizado donde, después de la lluvia melancólica, Eilish se ve favorecida por un bosque a su alrededor que reverdece por y para ella.