Acciones de 15 países podrían evitar catástrofe climática del Siglo XXI
Si EU hiciera caso omiso de estos acuerdos , las metas para 2030 se incumplirían por cerca de 5 mil millones de toneladas de CO2
De acuerdo a los datos proporcionados por el Panel Intergubernamental de las Naciones Unidas para el Cambio Climático (PICC), las emisiones mundiales de dióxido de carbono deben reducirse un 50% en un plazo de 10 años y medio. Esto significa que los 37 mil millones de toneladas de este gas de efecto invernadero emitidas actualmente deben reducirse a sólo 18 mil 500.
Para comprender la estructura de estas metas, su viabilidad y sus posibles variaciones es necesario conocer la distribución de emisiones correspondientes a los distintos países.
La Agencia Internacional de Energía (IEA por sus siglas en inglés) muestra cifras que indican cómo se distribuyen 30 mil millones de toneladas de emisiones de este panel intergubernamental.
Los cinco principales emisores son: China (24.4%), Estados Unidos ( 13%), India ( 5.6%), Rusia (3.88%), y Japón ( 3.1%). Con base a estos datos se puedan realizar ejercicios académicos de interés.
Ya que Estados Unidos se retiró de estos acuerdos, es pertinente cuantificar los efectos de este retiro en términos de las metas establecidas por el PICC. Si los países adheridos a los acuerdos reducen en un 50% sus emisiones y EU siguiera con su ritmo actual las metas no se cumplirían por un margen de cinco mil millones de toneladas, lo que equivale a 11 veces lo emitido por México en el año 2016.
El segundo ejercicio consiste en plantear una reducción en un 85% por parte de los mayores emisores a lo largo de los siguientes 11 años sin variar los métodos de producción de energía en los países restantes.
Este tipo de ejercicios académicos puede refinarse con datos más precisos y actualizados, que no necesariamente se encuentran disponibles públicamente de manera gratuita.
Las fundamentación de acciones a desarrollarse en distintas latitudes por medio de análisis comprendidos en su totalidad aumentará de manera significativa las posibilidades de éxito ante la crisis climática que atravesamos.
*Este artículo fue publicado originalmente en la revista C+ibero de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México*
