La memoria es un caleidoscopio de colores y texturas efímeras. A la distancia se distingue una variedad de pixeles indiscernibles. ¿Cómo es que la conciencia los elige? ¿Cómo es que el olor de la lluvia remite a tantas cosas inalcanzables y una corta secuencia de notas pone los pelos de punta sin explicación alguna? Es común pelearse con la memoria. No se tiene control sobre ella. Constantemente se pelea por recordar y por olvidar y todo se logra a medias. Bibio, también conocido como Stephen Wilkinson, ha hecho paz con su memoria: ha recurrido a recuerdos vagos para plasmar el conjunto de su conciencia musical, A Mineral Love.
Desde su debut, Bibio ha sido prolífico y audaz. Podría ser tachado como un músico inquieto e incoherente, pero su esencia siempre aparece en el centro de su trabajo, manteniendo una elegante congruencia. Lo mismo ocurre con su último trabajo ya que logra reunir un sin fin de influencias, entre ellas funk, indie rock, hip hop, easy listening y hasta unos fragmentos que podrían pertenecer a una secuencia de Plaza Sésamo. La cabeza de Stephen es un tornado rosado lleno de flores y sus respectivas espinas. Para este álbum, el artista se atrevió a entrar al estudio a grabar notas musicales a partir de aquel bullicio.
A Mineral Love da inicio en el lento despertar de un sueño, cuando la conciencia está tranquila y sus motores aún no arrancan por completo. En “Petals” Stephen susurra palabras tristes endulzadas con indicios de esperanza. A veces la memoria es un aliado y se asegura de recolectar datos escondidos del pasado para mantener una llama prendida durante los momentos más oscuros. La pieza combina la fortaleza de repetición en cuerdas con una serie de sonidos efímeros y disonantes. Un recurso importante del disco es el uso de guitarras desafinadas que producen la confusión perfecta característica del mismo.
https://www.youtube.com/watch?v=-_GDl6cBebQ
El video para “Feeling”, creado en su totalidad por Bibio, es un bálsamo de simplicidad. La canción describe la saturación anhelada por la sociedad en función de la evasión personal. Se busca estar ocupado constantemente, no solo por aprobación social sino para evitar pensar demasiado en preguntas existenciales y realidades difíciles. Stephen aconseja relajarse, no pensar demasiado las cosas y aceptar las cuestiones inevitables de la vida. Todo esto acompañado por un ritmo sumamente groovy para dejar caer los anteojos y dejarse llevar.
Como es costumbre, Bibio introduce segmentos cortos de belleza y reflexión entre las piezas más llamativas del álbum. Este es el caso de “Raxeira” y “Wren Tails”, elementos que derriten el disco para producir su conjunto. Sin duda, A Mineral Love remite a Ambivalence Avenue donde siete años atrás Stephen logró transmitir emociones profundas a través de música ligera y relajada, perfecta para una caminata en un día soleado y ventoso.
https://www.youtube.com/watch?v=NO6mA4jJvAg
Cada sonido del disco está grabado desde cero, aunque Stephen pretende que suene como un conjunto de sampleos. Tal vez este es el significado del amor mineral, ya que lo mineral se refiera a toda sustancia que ocurre naturalmente. Es a través de estas sustancias que se logra un disco sumamente rico; repleto de texturas interesantes.
Sus influencias vienen de todo lo que ha escuchado, desde álbumes que conoce de pies a cabeza hasta canciones que escuchó una sola vez en un bar. Así funciona la memoria, una serie de sampleos creados de manera orgánica por la percepción individual. La totalidad de la memoria es la esencia del ser y no un conjunto de datos categóricos. Por esto, la manifestación musical de Bibio es el valiente y humilde intento de llegar a la intimidad con uno mismo y, asi, producir la forma más honesta de arte.