La constante lucha entre lo que es real contra lo que es artificial se ha convertido en un binario común del arte contemporáneo. El objetivo no es caer en argumentos simplistas que digan que la tecnología es mala, sino entender la manera en la cual la mente humana es transformada por versiones artificiales de experiencias naturales y preguntarse: ¿cómo podemos sentirnos completamente vivos y presentes en tiempos de constante distracción?
La voz infantil y dulce de la bellísima Emily Haines ha regresado a la escena musical después de tres años de ausencia, con una nueva propuesta de la banda canadiense que nació antes de los smartphones y los iPads. El quinto álbum de estudio de Metric fue producido por el guitarrista de la banda, Jimmy Shaw, y se titula Synthetica. Lo primero que se escucha en este disco es: “I'm just as fucked-up as they say/ Estoy tan jodida como dicen”, una línea dura y desafiante; pero para cerrar Emily contrarresta con un poco de esperanza: “I´ve got nothing but time, so the future is mine/No tengo nada más que tiempo, así que el futuro es mío”
Como su nombre lo indica, la música de Metric es mecánicamente perfecta; esto se demuestra en “Speed the Collaspe”, que empieza con una tonada que remite a “Maps” de los Yeah Yeah Yeahs con una guitarra que suena como la de “Exit Music (For a Film)” del OK Computer. “The Void” y “Clone” logran contrastar ritmos fríos y tonos rígidos con las vocales vulnerables de Haines. Incluso escuchamos que la vocalista cambia un poco su estilo a un tono girlish medio forzado en “Lost Kitten” y balancea la acidez del dueto con Lou Reed en “Wanderlust”.
La voz de Haines le da sentido a la filosofía de Synthetica, su posición siempre es clara a nivel lírico, pero su voz de la un toque de profundidad y ambigüedad a la música, lo que propone un debate entre lo artificial y lo natural. Metric no trata de hacer declaraciones de cómo la tecnología cambia nuestra cultura y nuestra mente, simplemente están haciendo preguntas abismales, a través de su música, conscientes de que no existen respuestas fáciles.