La migración en México: un problema económico, social y emocional La migración es un fenómeno social que aqueja a México desde hace tiempo. Un estudio realizado por el Centro Hispánico Pew en Washington reveló que entre el 2005 y el 2010 un total de 1.4 millones de mexicanos emigraron a Estados Unidos. La cifra no sorprende, si se considera que para el 2010 datos del Coneval (Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social) arrojaban que 11.7 millones de mexicanos (46.2% de la población) vivían en pobreza extrema y para abril de este año el desempleo ya alcanzaba los 8.7 millones de personas.
Si bien es cierto que desde el 2007 las remesas continúan siendo la tercera fuente de ingresos para el país, aportando alrededor de 2, 092.88 millones de dólares anuales según el Banco de México y el 46% de los ingresos familiares para el 6% de los hogares mexicanos, la migración sigue sin garantizar una mejor calidad de vida para los migrantes. Lo que es más, muchas veces implica abusos, discriminación y tratos indignos de parte de las comunidades extranjeras. Cuenta de ello se da a través de iniciativas como la Ley Arizona y el reciente aviso sobre la militarización de la frontera estadounidense.
La Universidad Iberoamericana está consciente de esta problemática. Por ello, ha llevado a cabo un proyecto de investigación titulado Campesinos en el capitalismo tardío ¿Fin de los campesinos? Éste corre a cargo del Dr. Armando Yerko Castro y señala que, más que las causas económicas, son los factores sociales como la presión que ejercen los padres sobre los hijos, los que orillan a los mexicanos a abandonar el país.
El Mtro. Juan José Solis,encargado de la divulgación científica de dicha institución, recalca que el proyecto es importante pues aporta un elemento que pocas veces ha sido considerado en otras investigaciones del fenómeno: el emocional. “Lo más grave no es que los migrantes sean sometidos a trabajos indignos, sino que ellos mismos se convencen de su supuesta inferioridad y acaban aceptando esas condiciones de vida. Un ejemplo muy puntual de esto es el que el Dr. Yerko presenta. En el que narra como dos migrantes mexicanos murieron tras ser contratados por una empresa norteamericana, después de desempeñar una labor en el manejo de residuos tóxico sin recibir instrucción alguna de los peligros que esto representaba.“
La investigación no planeta una solución real al problema, debido a que para ello sería necesario crear fuentes de empleo suficientes, bien remuneradas y con seguridad social, y esto no es posible. Sin embargo, su valor radica en por un lado, trata de concientizar a la sociedad sobre la violación a los derechos humanos que los migrantes reciben y, por otro, pretende que el propio migrante se percate de su valía para que deje de aceptar condiciones de vida indignas. Fotografía obtenido de: http://mexico.cnn.com/