La manera de revolucionar las estrofas: Modern Vampires Of The City de Vampire Weekend
En Nueva York, cada día se encuentra música por todos lados, desde artistas callejeros que deciden mostrar su arte en las diferentes partes de esa ciudad, hasta los que se encierran en su cuarto con amigos para tratar de encontrar un camino en una industria muy peleada y que constantemente busca cambiar.
Un cuarteto de ese misma ciudad decidió hacer música, experimentar con los sonidos que se dan en ese instante, además revolucionando el sonido, pues luego de familiarizarnos con el afrobeat y el indie pop, Vampire Weekend nos entrega su tercer nuevo material discográfico, que si bien a veces las críticas suelen ser duras, esta vez la banda fue elogiada de la mejor manera posible.
Modern Vampires Of The City, lanzado el 14 de mayo del 2013 bajo el sello XL Recordings, mostraba una madurez en el sonido de la banda oriunda de Nueva York, piezas que nos dan una idea de jazz diferente, como si ellos lo hubiesen creado en su momento, guitarras que emulaban el sonido de Led Zeppelin o cualquier otra banda de los 90.
Lee también: Jeff Beck en 9 canciones. ¡Disfruta de su estilo único!
Promocionando el segundo material de la banda, Vampire Weekend estaba de gira, y en los descansos que tenía entre esas presentaciones se daba a la tarea de crear un nuevo disco, algo que para ellos mismos fue un reto divertido, ya que en algún tiempo experimentaron con sus sonidos en otros grupos.
El disco abre con “Obvious Bicycle”, una balada que suena tranquila; una conjunción de jazz perfecto para escuchar en familia, con amigos, en una reunión familiar. Es un piano impresionante que se va desmarcando, pero sin perder la lírica.
“Unbelievers” es una versión más explosiva, sin llegar a la exageración. Usa los instrumentos de forma balanceada para generar un sonido agradable y sobre todo revolucionario, un doblete marcado. ¿Sonido maduro?, claro, el nivel de composición superó las expectativas en este track.
Sonar enormes es un reto complicado, pero cuando lo haces y aún así no eres prejuicioso, que te mantienes con los pies en la tierra, eso es lo que logra “Step”, una melodía majestuosa; es de otro universo, como si los acordes se hubieran creado en Marte.
Vampire Weekend casi siempre demuestra de qué bandas son fans o cuáles los han inspirado. Ezra Koenig alguna vez dijo: “Led Zeppelin es una banda completa”. No mentía. Esa idea, les dio para escribir “Diane Young”, el primer sencillo que la banda lanzó para promocionar el disco, siendo un éxito en abril. En la mente de millones de personas, solo se repetía de manera acertada: “Baby, baby, baby, baby right on time…”.
Llegamos entonces a la parte media de la cara A del disco. El track número seis de 12, “Hannah Hunt”, parte de una historia:
“Nuestros días eran largos nuestras noches ya no
Cuenta los segundos, viendo las horas
Aunque vivimos en el dólar estadounidense
Tú y yo, tenemos nuestro propio sentido del tiempo”
Una lágrima recorre tu mejilla, y te hace pensar que todo va a estar bien a pesar de todo.
Llega esa pausa. La aguja llegó al final del lado A y es momento de levantarla y girar el disco. Vampire Weekend sabía que todo sería un carrusel de sonidos y experimentación.
“Everlasting Arms” es un mensaje a un país que a veces está desunido, que en ocasiones solo piensa en armas o en poder; tal vez un poco de tranquilidad les vendría bien.
Si bien Vampire Weekend es una banda que siempre ha estado presente en el imaginario colectivo, ahora se posiciona de una manera majestuosa. Uno de los tracks de este disco forma parte de uno de los juegos más populares del globo terráqueo. La FIFA, en su edición 14 del videojuego de futbol, los incluyó con “Worship You”, un trabalenguas que cantabas; aunque el inglés no fuera el mejor, la intención estaba.
“Ya Hey” es una parodia a una rola de OutKast. Una parte melódica, sublime, con pianos, guitarras, baterías, acordes y una voz celestial. La rola que casi marca el final del disco, por sí sola se crea una historia de éxito.
Vampire Weekend demostró que no es necesario seguir con una fórmula, que los sonidos y las cosas están para experimentar, jugar, crear y conformar un disco que si se piensa y se escribe bien, la ciudad más oscura se vuelve un sol.
Te recomendamos: ¡Cartel completo del festival Ceremonia 2023!