Fotos por Rafa Ramírez
Su nombre es Giorgio Moroder, pero podemos decirle Giorgio. Así se presentó el reconocido productor italiano cuando salió al escenario para cerrar el festival Corona Capital en el Bizco Club. Célebre y paciente como un curioso abuelito de 73 años (edad que sí tiene), Giorgio se tomó su tiempo para presentarle a la audiencia a Francisca, su esposa que de hecho es mexicana, y comentó que ella le traería una copa de vino en cualquier momento, cosa que sí sucedió.
Algo muy lindo, fue que después de aclamar a Giorgio desde antes de que saliera al escenario, los asistentes también le aplaudieron a Francisca al verla con él; y es que Giorgio parece estar muy orgulloso de ser su esposo. Incluso en el backstage (donde por cierto, Giorgio fue literalmente perseguido por una horda de medios y fans) el productor presentó a “su mujer” en perfecto español durante las entrevistas mientras ella le tomaba fotos con el iPhone.
Ya después de su ahora icónica presentación à la “homenaje de Daft Punk”, Giorgio se dispuso a tocar un DJ set por su cuenta (es sabido que a veces trae ayudantes) y aunque suene trillado o incluso despectivo por lo que representa el productor italiano como institución, puso a bailar a los que fueron a verlo cuál DJ de boda. Los éxitos fueron muchos y una buena parte de la audiencia reconoció todas y cada una de las canciones sin problemas. Entre algunas estuvieron “What a Feeling” de Flashdance, su increíble remix para “Love to Love You Baby” de Donna Summer y "From Here to Eternity (Reprise)" del propio Giorgio. Es importante aclarar que aunque algunas no sean técnicamente “suyas”, sí le pertenecen hasta cierto punto, pues él es el productor detrás de montones de éxitos ochenteros.
Al final, la gente pidió un encore y al parecer Giorgio ya no traía tantos tracks, por lo que volvió a mezclar dos de los anteriores. Uno de ellos fue “Call Me” de Blondie y con ese último play, la canción de los neoyorkinos sonó tres veces en total sobre los escenarios del Corona Capital. (Una tocada por Blondie el sábado y dos mezcladas por Giorgio el domingo). La verdad es que a pesar de que se notaba que ser DJ no es el fuerte de Giorgio Moroder ya que el señor tiene 73 años y nunca antes había hecho algo así, su show fue muy divertido y se sintió algo así como una mega reunión familiar para bailar al estilo de la vieja escuela con el abuelo cool que muchos quisieran tener.