Luces. Maquillaje. Cámara. Guión. Escenario. Todo listo. Y acción.
El viento soplaba de manera agresiva, por lo tanto las banderas rojinegras y blanquiazules ondeaban en las inmediaciones del estadio Hidalgo, aquel que no se pudo vestir de gloria en el Clausura 2014 después de ver perdida una final ante León. Pero ahora era turno de demostrar en casa la vitalidad de un equipo joven comandado por Enrique Meza que puede sorprender a cualquiera, incluido el Atlas de Tomás Boy.
Fue un juego altamente disputado en media cancha: pases precisos y barridas acertadas. Fútbol decente, pues. Sin embargo, no todas las emociones y balones ganados quedarían alejados de las porterías que defendían Federico Vilar y el eterno Oscar “Conejo” Pérez. Hasta entonces, el guión no tenía mayores sobresaltos. Poco antes del intermedio, el primer clímax, la primera aparición del héroe.
Matías Alustiza recibió un centro por la banda izquierda cortesía de Daniel Villalpando, así el “Chavo” Alustiza tuvo que esforzarse al máximo para chocar el balón con la cabeza y mandarlo al fondo de las redes. Ni su estatura ni la defensa rojinegra fueron un impedimento.
El 1-0 le dio pauta a Enrique Meza para buscar más al ataque sin que se descuidara el club hidalguense en la zona baja. Sólo habían pasado tres minutos después del inicio de la parte complementaria y una vez más apareció el “Chavo” para clavar su segundo gol; como si fuera parte de una alfombra roja y negra desparramó a cuatro rivales en los linderos del área a base de fintas y recortes, se internó al área, hizo salir en vano al guardameta y definió como solo los argentinos lo saben hacer. Gol maradoniano. Alustiza 2, Atlas 0.
Pachuca ya no prestó el balón, tocaba con cautela en media cancha, no quiso ceder su partido, su victoria. Después de haber puesto en la pizarra el 2-0, los tuzos no se rindieron e intentaron meter un tercero, el cual llegó por la vía penal. Aldo Leao derribó a Walter Ayoví dentro del área, Jorge Antonio Pérez Durán pitó la falta; alguien buscaría un hat-trick y lo encontró, Alustiza cobró a la derecha de Vilar. 3-0. El show del Chavo.
Muy bravío es el equipo de Boy. Tanto como para no dejarse golear; un dejo de dignidad ha de surgir. El rival no debe salir ileso. Alfonso González descontó con un impacto de pierna izquierda que venció al “Conejo” Pérez. El Atlas perdió el invicto y Alustiza fue todo menos un “Chavo”. Suyo fue el show.
Fade out. Luces y cámaras apagadas. Desmaquillar. El guión guardado. Escenario desmontado. El show ha terminado.
David Mancera
@BatMancera7