Una de las cosas que mas me gustan del cine es su interminable capacidad para dialogar con la realidad y retratarla. Muestra de ello es la película griega Park de Sofía Exarchou que toma como punto de partida el abandono que sufre la antigua villa olímpica de los recientes juegos de Atenas para hablar de, la igualmente abandonada juventud e infancia de las afueras de la capital del país heleno. Recordando a personajes como El Jaibo y Meche de Los olvidados de Luis Buñuel, Dimitris y Sara son los modernos protagonistas de este fresco social que nos recuerda que desde la crisis y la dificultad también se puede hacer arte.
Dura y sin concesiones Park es una de las cartas fuerte que presenta el país anfitrión este año en el concurso internacional de Tesalónica y una de las cintas mas aplaudidas por el público en lo que va del festival. Desde acá les sigo platicando.
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