(Sony/Columbia, 2010) La fama juvenil ha trastornado a un sinfín de luminarias, desde el recién fallecido child star, Corey Haim, a Carlos Espejel que no ha podido superar su etapa como Chiquidrácula, hasta llegar al ex ‘N Sync, Lance Bass, que soñaba con viajar por el espacio; resultados trágicos. MGMT, la sensación juvenil “neo-hippie” de la escena musical, lucha contra los delirios ocasionados por la fama en su segunda producción irónicamente titulada Congratulations.
Con su aclamado debut Oracular Spectacular, MGMT se graduó con honores de la preparatoria musical, ahora Andrew VanWyngarden y Ben Martin Goldwasser presentan Congratulations como uno de los exámenes más difíciles para una banda: el segundo álbum. Desde su concepción, esta placa era uno de los regresos más esperados y tras las declaraciones donde sus creadores afirmaban que ésta no tendría sencillos ni éxitos como los de su álbum anterior, la expectativa se elevó aún más; según sus creadores, este lanzamiento es producto de la fama excesiva que les brindó su antecesor. El resultado es un recorrido psicodélico por la psique de MGMT, producido hilado canción por canción y enmarcado bajo un nombre que refleja lo que el grupo no espera escuchar de este disco, Congratulations (Felicidades).
Este material cuenta con tres canciones que rinden homenaje “y/o” se burlan de tres personajes importantes en el mundo de la música. “Song for Dan Treacy”, uno de los tracks a destacar en el disco, recuerda Dan Treacy, único miembro constante en la historia de la banda punk Television Personalities, mediante un piano esquizofrénico que se transforma en órgano de iglesia espontáneamente y se acompaña por una guitarra playera y percusiones del surf. En la pieza instrumental “Lady Dada’s Nightmare”, violines melancólicos y un piano sin esperanza se entremezclan con los gritos y lamentos de lo que parece ser un súcubo, para hacer referencia a lo que para MGMT parece ser una atormentada diva del pop, la infame Lady Gaga. El último de los homenajes, “Brian Eno”, es una confesión donde los jóvenes músicos admiten, al menos sarcásticamente, que nunca podrán superar al miembro del legendario grupo Roxy Music, creador de las Oblique Strategies y productor con el toque del Rey Midas, el maestro Brian Eno.
“We’re always one step behind him / He’s Brian Eno, Brian Eno!”
(Siempre estamos un paso atrás de él / Es Brian Eno. ¡Brian Eno!)
“He promised pretty worlds and all the silence I could dream of / Brian Peter George St John Le Baptiste De La Salle Eno”
(El prometió hermosas palabras y todo el silencio con el que pudiera soñar / Brian Pedro Jorge San Juan El Bautista De La Salle Eno)
Fuera de los curiosos tributos, también destaca “Flash Delirium” que fungió como primer adelanto, no así como sencillo del disco. Esta canción es la catarsis del grupo hacia la sociedad que tanto los ha elogiado y los tiene en un enorme pedestal de colores neón; irónicamente es lo más parecido a sus piezas anteriores, un micro-solo de flauta dulce y un perverso sintetizador que incita a las formas más bizarras de baile, al estilo de The Rocky Horror Picture Show; delirios atemporales, snobs y unos jóvenes que sólo buscan que los dejen ser.
Definitivamente, ninguna de las canciones de este nuevo álbum provoca efectos similares a las peligrosamente contagiosas “Electric Feel”, “Kids” o “Time to Pretend”, pero aún así brilla con una luz única, honesta y especial; lástima que pocos les perdonarán la falta de ritmos “fosfo-bailables” en el disco. Ojalá que MGMT logre salir del trastorno que aseguran les ocasionó la fama para que sigan lanzando producciones misteriosas e interesantes y no los veamos en comerciales de medicina para el esófago como a otras celebridades juveniles que no soportaron el estrellato. La prueba del segundo álbum ha sido exitosamente superada, sólo queda decir Congratulations.
Después de que Congratulations se filtró en Internet, la banda decidió subirlo a su sitio para que la gente lo pueda escuchar de forma gratuita.