9 momentos en los que Macca cambió la música #McCartneyAt80
A los 80 años, Sir Paul McCartney tiene muchas cosas que contarle al mundo y sobre todo a las nuevas generaciones, que seguramente no tienen en el radar bien a bien algunos hechos que convierten a Macca en una leyenda viva. Así que les tenemos en orden cronológico, 9 momentos en los que McCartney cambió la música:
“I Wanna Be Your Man”
Desde el principio, The Beatles y The Rolling Stones han estado íntimamente ligados. Aquella rivalidad de la que mucho se ha hablado en realidad era una invención de la prensa y de algunos fans. En los hechos, el cuarteto de Liverpool en general apoyó mucho a los Stones: George Harrison fue el principal impulsor para que Decca los firmara. Ya dentro de la disquera, los Rolling necesitaban un éxito.
Dice la leyenda que en una calle de Londres iban caminando Mick Jagger y Keith Richards y, desde una limousina, John Lennon y Paul McCartney los miraron e invitaron a subir. Paul McCartney ya tenía escrita la estructura de “I Wanna Be Your Man” tema que The Rolling Stones grabaron en el verano de 1963 y se convirtió en Top 15 del UK Official Chart. El primer éxito que necesitaba la banda.
Muchos años después, en la gira del 60 aniversario de los Rolling Stones, en la ciudad de Liverpool el grupo tocó “I Wanna Be Your Man” con la siguiente advertencia, “ésta es una canción de unos tipos de por aquí”.
Paul & Jane
Cuando The Beatles se convirtieron en el súper éxito repentino del Reino Unido sus vidas cambiaron, sus hábitos cambiaron, sus amigos fueron diferentes, de alguna forma pasaron de ser los chicos de clase trabajadora originarios de un puerto, al centro de atención nacional con base en Londres, la gran ciudad.
Cada uno asumió de forma distinta el impacto que Londres tuvo sobre ellos. En el caso de Paul McCartney, su nueva novia la modelo Jane Asher se convirtió en la influencia más grande de su vida.
Originaria de una familia de clase alta cercana al gobierno británico y a la vida de la alta cultura inglesa, Jane estaba muy conectada en los círculos artísticos londinenses. Gracias a las amistades de su familia, Paul tuvo acceso a todas las manifestaciones vanguardistas del arte contemporáneo: a artistas gráficos pop como Richard Hamilton, Peter Blake y Brian Clarke; a músicos avant garde como Luciano Berio, Ornette Coleman o Phillip Glass; a escritores de la Generación Beat como William Burroughs y Alen Ginsberg. Incluso, gracias a los refinados gustos de la familia Asher en general, McCartney adquirió sus conocimientos de música clásica –por supuesto también llegados a él gracias a George Martin–, claves para el desarrollo de obras icónicas de Los Beatles como “Yesterday”, la composición del soundtrack de la película The Family Way -primera obra donde un Beatle hace algo como solista y primera vez en la que una estrella del rock incursiona en el terreno de lo clásico-, todas las composiciones de Paul en Revolver y la creación de Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band.
The Beatles Vs. The Beach Boys
En la historia del rock hay momentos clave que de no haber pasado las cosas como las conocemos simplemente no serían. Algunas de éstas son hechos casuales, otras son consecuencias de la feroz competencia que existía entre los músicos de los años sesenta. En los años sesenta, la gran variedad de estilos musicales y su éxito comercial hacía que, por ejemplo, una semana las listas estuvieran dominadas por bandas con influencia del blues, y a la siguiente por artistas de R&B.
En el caso particular de los Beach Boys y los Beatles existía una peculiar competencia en el terreno artístico más allá del comercial. Brian Wilson es quizá el más grande genio del rock estadounidense, un creador capaz de dirigir una orquesta, un coro y músicos tradicionales de rock al mismo tiempo. Para Wilson, el arribo de Los Beatles como los máximos exponentes de la invasión inglesa significó una cierta frustración que lo llevó a competir con el Cuarteto de Liverpool de una manera obsesiva, a pesar de ser amigo personal de Paul McCartney, quien lo admira abiertamente desde que lo conoció.
La obsesión por superar a Los Beatles por parte de Wilson llegó el día en que Brian escuchó Rubber Soul por primera vez. El disco le abrió una perspectiva, todos los caminos son posibles en la música popular.
De esa competencia surge Pet Sounds de The Beach Boys en 1966, una de las cimas de la cultura popular occidental.
En su lanzamiento, Pet Sounds no tuvo el éxito esperado en Estados Unidos, sin embargo, en el Reino Unido se convirtió en un éxito instantáneo y en una referencia creativa entre los músicos de ese momento, entre ellos John Lennon, George Martin y muy particularmente Paul McCartney, quien lo ha referenciado desde entonces como el disco que cambió su vida
“Pet Sounds es el disco que cambió mi vida; le he dado una copia de este disco a cada uno de mis hijos como base de su educación”.
Tan grande fue la influencia de Pet Sounds sobre Macca que pensaba en una obra que pudiera igualarla y no sólo éso, sino que pudiera contestarle a Brian Wilson en esta competencia. Así surge la idea del disco que lo cambió todo: Sgt Pepper’s Lonely Hearts Club Band.
Jimi Hendrix
Es muy conocida la adicción al trabajo de Paul McCartney. Alguna vez declaró que todos los días al despertarse compone una canción o un tono. Para la mitad de los 60, sus propios compañeros en el Fav Four estaban hartos por su workaholismo. George Harrison dijo en la Antología que en esa época si sonaba el teléfono tenían miedo que fuera Paul porque seguramente los iba a llamar para grabar. John Lennon le compuso “I’m Only Sleeping” como respuesta a sus hábitos compulsivos.
Durante esos tiempos, Paul solía quedarse hasta muy tarde trabajando en los estudios Abbey Road. En una de esas noches, McCartney asistió luego de una larga jornada de trabajo, a un bar donde se presentaba un guitarrista negro y estadounidense que era admirado en el círculo de los músicos de sesión en Londres. Todo el mundo lo conoce ahora: Jimmy Hendrix.
La historia del rock cuenta que la primera noche que los máximos rockstars ingleses vieron a Hendrix éste fue firmado por Chad Chandler de The Animals para ser su representante, pero a la mayoría de los biógrafos del rock se les escurre el hecho de que aquella reunión de la élite del rock inglés fue convocada por Paul McCartney, quien después de verlo quedó admirado. De hecho, los primeros en financiar el The Jimmy Hendrix Experience fueron John Lennon y McCartney. El mismo Paul en persona convenció a John Phillips para agregar en el cartel al propio Hendrix.
Quien haya ido a ver a Paul McCartney en vivo se preguntará por qué incluye “Foxy Lady” en su repertorio; ahora sabe la respuesta.
Reggae
En la primera etapa de Wings, Paul y Linda eran fanáticos de lo que hoy conocemos como “música del mundo”. Específicamente eran fans de los ritmos africanos, sobretodo de Fela Kuti, a quien visitaron durante su estancia en Nigeria para las grabaciones de Band on the Run. De hecho, “Ob-La-Di, Ob-La-Da” es un homenaje a la cultura jamaiquina, del ska y el rock steady.
Durante los años 70 cuando Bob Marley había cambiado la estructura de su banda para convertirse en la figura principal de Los Wailers fue fichado por Chris Rowell, fundador de Island Records. La persona que más impulsó el fichaje de Marley para Island fue Paul McCartney quien ya había experimentado con el género, incluso su éxito “Live And Let Die” incluye un puente de reggae escrito por Linda. Por cierto, la admiración entre todos los miembros del Cuarteto de Liverpool y Bob Marley era mutua; sin embargo, la intervención de McCartney para que el reggae se popularizara alrededor del mundo fue decisiva, no sólo para que Chris Rowell firmara a Bob Marley, Paul y su grupo Wings fueron las primeras mega estrellas en difundir el género en el mainstream.
Años después, Paul y Linda ganarían la Palma de oro en el festival de Cannes por el video de la canción “Reggae Seaside Woman”; aparecieron en la grabación del tema “One Love” del propio Bob Marley, y Paul apareció en el video póstumo de la misma canción.
“Rockestra Theme”
Para su disco de 1979, Back To The Egg, Macca tenía la inquietud de formar una orquesta de roqueros, influenciada por las orquestas de la era del swing pero constituida totalmente por instrumentos de rock and roll. Esta es la primera vez que tantos rockstars estuvieron juntos para grabar un solo tema. Los integrantes fueron los miembros de Wings, David Gillmoore, guitarrista de Pink Floyd, Hank Marvin, guitarrista de los Shadows, Pete Townshend, guitarrista de The Who, John Bonham, baterista de Led Zeppelin, John Paul Jones bajista de Led Zeppelin, Gary Brooker, guitarrista de Procol Harum, Ronnie Lane y Bruce Thomas integrantes de The Small Faces. Keith Moon baterista de The Who aparecería en la orquesta de Rock pero falleció un mes antes de la grabación.
El sencillo obtuvo el Grammy a mejor grabación de rock instrumental en 1981 y el proyecto fue la base para el lanzamiento del concierto por Kampuchea.
McCartney II
Después de abandonar a Wings, Paul McCartney se recluye por un cierto tiempo en su casa de Londres para repensar la dirección de su carrera. Ahora sus influencias contemporáneas son los Talking Heads, la música ambiental de Brian Eno, los artistas del new wave como The Pretenders y The Clash pero sobre todo el innovador y seminal sonido de Kraftwerk. De hecho, compra el mismo sintetizador y secuenciador que Kraftwerk usa en su disco Trans Europe Express.
En su claustro, el segundo en su carrera, compone una serie de temas con influencia electrónica con voces procesadas, delays, ecos, cajas de ritmos, loops los cuales había inventado con los Beatles para “Tomorrow Never Knows”. Recluta a David Kane, asistente de George Martin y Chris Thomas como ingeniero de sonido y en tan sólo unos meses graba la segunda parte de su obra en absoluta soledad.
En su momento, el álbum fue destrozado por la crítica, los fans lo detestaron excepto el sencillo “Coming Up”. El rechazo del mainstream hizo que Paul desistiera en sus experimentaciones profundas; sin embargo, el impacto de McCartney II es posterior a su tiempo.
Con los años, el álbum ha sido elogiado por la generación de la música alternativa sobre todo de los artistas de tendencia electrónica. Damon Albarn ha declarado que el sonido de Gorillaz está basado en “Check My Machine”; Hot Chip y Kasabian han mencionado a McCartney II como uno de sus discos favoritos; “Temporary Secretary” ha sido mencionada por la prensa posterior a los años 90 como una de las piezas fundamentales del synth pop; los videos de “Coming Up” y “Waterfalls” se inspiraron en los avances técnicos que los Talking Heads usaron para el video de “Once in A Lifetime”, por cierto, las tres piezas son mencionadas como videos básicos de la era pre MTV.
Gracias al fracaso crítico y comercial del disco en su momento, Macca echó toda la carne al asador y su siguiente obra Tug of War es una de sus obras más aclamadas. 40 años después, el mismo McCartney comenzó a dimensionar el impacto de su trabajo de 1980 en las nuevas generaciones.
The Get Back Tour
Para 1989, la mayoría de las carreras de los rockstars de los 60 y 70 estaban en crisis. Para figuras del tamaño como los Rolling Stones, Queen, The Who, el panorama era difícil; sin embargo, los conciertos de estadio en giras prolongadas quizá fueron el primer recurso nostálgico para rememorar las viejas glorias en el rock.
La gira Get Back Tour de Macca ostenta el crédito de ser la primera súper gira con llenos totales en estadios y arenas alrededor del mundo. Europa, América del Norte, excepto México, Sudamérica, Asia, donde McCartney rompió su promesa de volver a Japón por sus problemas legales, y Australia. El récord Guiness del concierto con mayor audiencia en un recinto cerrado hasta la fecha, lo tiene un showcase de esta gira en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
A partir de esta gira existió la era de las súper giras, la evolución del rock de estadio: los Rolling Stones hicieron la gira Steel Wheels. Michael Jackson estuvo por años de gira con el Dangerous World Tour. Madonna rompió récords con su gira Erotica. Y U2 le presentará al mundo la evolución de esta evolución de los conciertos con la gira Zoo TV Tour. Y todas estas giras comenzaron con The Get Back Tour.
McCartney a los 80
Llegar a los 80 años para cualquier ser humano es un logro de vida por el simple hecho de seguir vivo. Alcanzar la esperanza de vida y ser una súper estrella en activo es un logro que pocos seres humanos pueden presumir.
El espectáculo como una maquinaria cultural como lo conocemos, apenas tiene alrededor de 70 años para la generación del jazz y los crooners de los años 40 y 50; llegar a los ochenta no fue posible para la mayoría. En el caso de Frank Sinatra quien sí lo logró lo hizo en el retiro parcial y en plena decadencia física. Para muchos pioneros del rock no fue posible debido a sus tempranas muertes, y para quienes lo lograron lo hicieron algunos en el olvido, otros retirados.
La generación de los años 60 es la primera que arroja toda una lista de superestrellas octogenarias aún en activo y con fama mundial: Bob Dylan, Ringo Starr, próximamente Mick Jagger, Keith Richard y ahora Paul McCartney.
Al llegar Paul McCartney a los 80 años ha abierto todo un nuevo paradigma para el resto de los artistas de su generación y de generaciones posteriores: “es posible llegar a la senectud, seguir activo, tener éxito y pensar en el futuro”.