Open”, y después con los videos de estas canciones; en donde contaron historias acerca de las dificultades del amor.
¿Quién está detrás de este sonido íntimo y seductor?, ¿Quién es esa mujer de voz tan intoxicante?, ¿Acaso es Sade? Durante los últimos meses Rhye estuvo bajo un anonimato, sin dejarnos saber nada de quién estaba atrás de este sonido. Nos trajeron de arriba a abajo con un coqueteo constante durante meses, con sus dos sencillos “The Fall” y “Al fin tenemos las respuestas. Resulta que esa voz no es de una mujer, sino de un hombre canadiense llamado Mike Milosh (cantante y productor), quien ha sacado tres discos anteriormente como solista. Su sidekick, Robin Hannibal, un productor danés que ha estado rondando la escena del electro-soul por un tiempo.
Desde Los Ángeles, crearon este proyecto llamado Rhye. ¿Y por qué tanto misterio? Según ellos querían que la gente escuchara su música y tuvieran su propia experiencia antes de ponerle una cara y juzgar. Lo lograron muy bien.
Su disco debut, Woman (Innovative Leisure), definitivamente es electro-soul sexy e ideal para hacer el amor. Un disco saturado de lujuria, sexo y amor desde la imagen en la portada hasta la última canción, pero que al mismo tiempo deja mucho a la imaginación. Rhye encuentra el balance perfecto en donde tocan estos temas sin sonar grotescos ni vulgares.
“Open”, el primer track del disco, comienza con unas cuerdas que evocan la imagen de los primeros rayos del sol asomándose por nuestra ventana un sábado por la mañana (sin cruda, por supuesto…) enredados a esa persona que nos prende por todos lados.
Ritmos que provocan querer bailar encerrados en un cuarto iluminado por velas con nuestra pareja es la experiencia que crea “The Fall”. Desde sus primeras notas y esa frase abridora: “Make Love To Me” (Hazme el amor), nos atrapa dentro esa intimidad que sólo ellos tienen la capacidad de producir. “The Fall” cuenta con un video que vale mucho la pena ver: la historia de un hombre en una relación pasando por su “mid-life crisis”, recordando esos años en donde todo era más ligero y divertido en el amor.
http://youtu.be/F6yfFWvoygY
Bajo unas sábanas blancas a plena luz del día hay una pareja comiéndose a besos mientras se despide en “3 days”. Un beat alegre con una letra triste que describe ese sentimiento insoportable de estar extrañando a alguien antes de que se vaya.
Canciones que crean imágenes de caricias y besos suaves; movimientos lentos y seductores, acompañadas de cuerdas, trompetas, pianos, sintetizadores y mucha temperatura emocional guiada por la voz andrógina de Milosh. Un disco que narra una historia acerca de un romance con lujo de detalle a cada momento, y en donde se habla del amor y la sensualidad de una manera muy honesta.
Gracias a este anonimato, el dúo logró que no se emitieran juicios antes de saber que “ella” es un “él”, sino que nos impresionó. Interrumpió la forma en la que vemos la masculinidad, por una manera más frágil y vulnerable, y a expresarnos de una forma mucho más segura y cómoda en nuestra propia piel. Rhye logra mostrarnos por qué el anonimato puede ser algo muy poderoso.